Entorno de trabajo colaborativo, inclusivo, innovador y con excelentes oportunidades de desarrollo profesional. Quien se identifica con una marca corporativa por consumir sus productos y servicios no siempre conoce estas y muchas otras características de su marca empleadora. La preocupación por lo que se pone en el mercado es algo inherente a la naturaleza de las corporaciones. Sin embargo, alcanzar el éxito mediante el conjunto de estrategias que colocan al profesional en el centro de las prioridades es un esfuerzo constante que recorre toda la trayectoria de la experiencia del colaborador.
“Las empresas reconocen cada vez más la importancia de externalizar características como marca empleadora que no son tan visibles en el mercado”, observa Gustavo Tavares, gerente regional para América Latina del Top Employers Institute.
Según el ejecutivo, hoy las atenciónes están menos dirigidas a los procesos repetitivos y más a la conexión con la cultura, el legado y el propósito de las empresas. "En todo esto, hay un profesional con valores personales conectados con los de la organización", dice.
Las marcas empleadoras fuertes tienen mucho que enseñar. Y a medida que comparten propósitos y resultados de programas aplicados y alineados con la cultura organizacional, estas empresas están moldeando el mercado laboral y convirtiéndose en atractivas y deseables para los profesionales.
Entre varias iniciativas exitosas orientadas a la construcción de marcas empleadoras, que Employer Branding Brasil (EBB) refuerza como propósito, Tavares destaca las experiencias de los Top Employers Nestlé, BAT Brasil y Takeda.
BAT Brasil estructuró e implementó un programa de Alumni para ex-colaboradores, fundamentando que la experiencia del empleado no termina al finalizar su "estancia" en la empresa. Nestlé ha estado compartiendo información sobre las decisiones tomadas para la implementación de la plataforma People Match, enfocada en planes y oportunidades de carrera. En Takeda, una de las iniciativas combina datos e Inteligencia Artificial tanto para la carrera como para el desvinculación.
A partir de las experiencias de estas tres empresas Top Employers, Tavares destaca que las acciones e inversiones en la marca empleadora difieren de una compañía a otra. Sin embargo, el ejecutivo observa que son las narrativas personales de los empleados las que corroboran los atributos de la marca empleadora. "Esto aporta legitimidad, afianza el sentido de pertenencia y refuerza el interés de los profesionales en trabajar en esa empresa", señala.
Según Gustavo Tavares, es imperativo que las organizaciones compartan, siempre que sea posible, sus ejemplos de éxito en employer branding. "Sin duda, muchas empresas se beneficiarán de la experiencia compartida. Para la corporación también es una oportunidad de conexión para mejorar los procesos", afirma.
La preocupación por la marca empleadora ha llevado a muchas organizaciones a iniciar, en este momento, sus programas de certificación para convertirse en Top Employers. "Reputación con visibilidad en el mercado, atracción y acciones de pertenencia están, sin duda, entre innumerables beneficios y condiciones derivadas del proceso de certificación", concluye el gerente regional del Top Employers Institute.