A Akamai, empresa de servicios en la nube que impulsa y protege la vida en línea, lanzó recientemente un informe sobre comercio electrónico y las prácticas en línea de los consumidores brasileños. Entre otras informaciones relevantes está la de que la generación Z es la que más reporta haber sido víctima de estafas digitales.
Solo el 44,76% de los encuestados entre 18 y 24 años, y el 45,33% de las personas entre 24 y 29 años afirman nunca haber sido víctimas de una estafa. Estas son las únicas franjas de edad en las que más de la mitad de las personas afirman haber sido víctimas; en la generación baby boomer (más de 60), son el 52,38%. Así, entre los encuestados, el número de personas de la generación Z que sufren estafas es un 17% mayor que entre los baby boomers.
La generación Z, en su definición más común, consiste en las personas nacidas entre 1996 y 2012, teniendo así entre 11 y 28 años. Los números brasileños reflejan una tendencia mundial. El año pasado,una investigación similarEn los Estados Unidos, realizada por Deloitte, indicó que los miembros de la Generación Z sufrían tres veces más estafas que los de la generación baby boomer.
Esto puede parecer contraintuitivo para muchos, incluso para los propios jóvenes, afirma Helder Ferrão, gerente de estrategia de industrias de Akamai LATAM. La generación Z, en definitiva, son los llamados nativos digitales, personas que no tuvieron contacto con el mundo pre-internet.
“Pero”, continúa, “las cosas terminaron siendo más complejas que eso: recientemente hubo una ola de noticias sobre empleadores que se quejaban de jóvenes que ingresaban al mercado sin conocer conceptos básicos de computación, como qué son los archivos y las carpetas. Porque tu experiencia es con celulares y tablets, pero no con computadoras. “De hecho, había un déficit en educación informática, pero los jóvenes aprenden más rápido: al adoptar nuevas tecnologías, adoptan nuevos hábitos”.
Un ejemplo de ello es la adopción de nuevas tecnologías por parte de los más jóvenes: el 75,52% de las personas entre 18 y 24 años afirma utilizar Pix para sus compras online, una cifra que desciende progresivamente con la edad, hasta alcanzar su nivel más bajo, el 47,62%, entre los mayores de 60 años.
Es ese gusto por la innovación lo que termina exponiendo a gente más joven a estafas. Lo que realmente está sucediendo es que las generaciones mayores confían menos en el celular. Las personas mayores de 60 tienden a simplemente no usar aplicaciones bancarias porque no confían en la tecnología.
“Si bien hay estafadores que se centran en las personas mayores”, concluye Helder, “también los hay que se especializan en los jóvenes. Estas estafas se basan en aplicaciones de citas, aplicaciones de inversión y aplicaciones de búsqueda de empleo. Los estafadores hacen circular anuncios en las redes favoritas de los jóvenes, como Instagram y TikTok; en algún momento, estas aplicaciones y anuncios se eliminan porque infringen las políticas de la tienda de aplicaciones, pero para entonces el daño ya está hecho”.
Hábitos de consumo
La estafa más común en cualquier rango de edad fue comprar productos y no recibir, lo que afectó a uno de cada cuatro brasileños, y, curiosamente, aquí la generación Z y los baby boomers empatúan como los más afectados, con casi el 30% pasando por esta situación. El segundo golpe más común es que clonen la tarjeta después de una compra en un sitio web: el 14% de los brasileños, pero aquí el grupo de entre 18 y 24 años se desempeña mejor que cualquier otro: solo el 9% ha pasado por esto, frente al 17% de los mayores de 60. En este golpe en particular, los baby boomers tienen el doble de probabilidades de caer que los más jóvenes.
Además de cuestiones de seguridad, la investigación de Akamai también reveló diversos otros aspectos sobre los hábitos de consumo en línea de los brasileños. La gran mayoría – 74% – afirma hacer compras en línea al menos una vez al mes, con un 6% que lo hace todos los días. Solo el 2% dijo que nunca compra por internet. La generación más propensa a comprar son los millennials: en el rango de 30 a 39 años, el 84% compra al menos una vez al mes (el porcentaje es 74% entre 18 y 24 años, 80% entre 25 y 29 y 58% para mayores de 60).
Otra diferencia de generación es la preferencia por sitios de compras nacionales o extranjeros. Cuando se habla de electrónicos, los más jóvenes (18 a 24) prefieren los marketplaces internacionales (33%) que los nacionales (30%), mientras que los mayores de 60 prefieren los nacionales (33%) frente a los extranjeros (23%). Aquí, también, puedes ver la mayor confianza del joven en novedades, como tiendas sin tradición en Brasil, comenta Helder. Aunque las peleas de generaciones siempre dan mucho de qué hablar, los jóvenes de hoy no son diferentes en todo de los del pasado. Están sujetos a factores humanos, incluso a caer en estafas, como todo el mundo.
El informe completo, en formato de libro electrónico, se puede descargaraquí.