Los pagos sin contacto a través de aplicaciones se han consolidado en el comercio minorista. Impulsados por la digitalización financiera global y la tecnología de Comunicación de Campo Cercano (NFC), el método se ha convertido en la preferencia entre los consumidores que buscan agilidad, practicidad y seguridad en sus transacciones financieras. Las empresas del sector financiero y los minoristas también ven el cambio como una oportunidad para mejorar la experiencia del cliente y ampliar sus estrategias digitales
El mercado global de pagos digitales debe alcanzar US$ 14,8 billones hasta 2027, según proyecciones de Statista. Y en Brasil, este crecimiento es impulsado por innovaciones como el Pix, que ya responde por más del 30% de las transacciones bancarias en el país, y por las billeteras digitales, como Apple Pay, Google Pay y Samsung Pay, que permiten el pago por aproximación sin la necesidad de tarjetas físicas
Los pagos sin contacto representan una revolución en la forma en que manejamos el dinero. Además de ofrecer más conveniencia, ellos garantizan mayor seguridad al evitar el contacto físico con terminales y la exposición de datos sensibles de la tarjeta, explicaRafael Franco, CEO deCódigo alfa, empresa especializada en el desarrollo de aplicaciones financieras
El impacto en el comercio minorista y la experiencia del consumidor
La adopción del pago digital en el comercio minorista ha crecido de forma acelerada. Redes de supermercados, restaurantes y grandes tiendas por departamentos ya ofrecen la opción como estándar de pago, reduciendo filas y haciendo las transacciones más rápidas. Además de eso, las aplicaciones de delivery y movilidad urbana integraron los pagos por proximidad a sus plataformas, facilitando aún más el proceso de compra
Para los minoristas, la adopción de este modelo también genera beneficios operativos. Los estudios indican que los pagos digitales reducen los costos por fraudes y contracargos, además de promover una mayor fidelización de los clientes. Según una investigación de McKinsey, consumidores que utilizan billeteras digitales gastan, en promedio, 30% más que aquellos que pagan con dinero o tarjetas tradicionales
"La digitalización de los medios de pago no es solo una tendencia", pero una transformación estructural del mercado. Las empresas que ofrecen esta experiencia integrada y fluida logran un mayor compromiso de los clientes y crean oportunidades de monetización, destaca Franco
Seguridad y desafíos de la digitalización
La seguridad es uno de los pilares de la adopción de los pagos sin contacto. Las billeteras digitales utilizan autenticación biométrica, criptografía avanzada y tokenización para proteger los datos de los usuarios. Sin embargo, el avance de la digitalización también impone desafíos a las empresas, como la necesidad de actualizaciones constantes en ciberseguridad y la adaptación de los consumidores menos familiarizados con las nuevas tecnologías
Otro desafío está en la inclusión digital. A pesar del crecimiento expresivo, muchas personas aún no tienen acceso a smartphones compatibles con la tecnología NFC o enfrentan dificultades para utilizar los servicios bancarios digitales. "La masificación de los pagos sin contacto pasa por un esfuerzo conjunto entre empresas", gobiernos e instituciones financieras para democratizar el acceso a la tecnología y garantizar que más personas puedan disfrutar de los beneficios de este avance, afirma Franco
El futuro de los pagos digitales
La evolución de los pagos sin contacto debe continuar acelerada en los próximos años, con nuevas tecnologías e integraciones que harán que la experiencia del usuario sea aún más fluida. Tendencias como elToque para pagar, que permite transformar smartphones en máquinas de pago, y la adopción del Pix por aproximación indican que el sector seguirá innovando
La combinación de seguridad, la conveniencia y la rapidez están consolidando los pagos digitales como la nueva norma en el comercio minorista y en la vida cotidiana de los consumidores. Para empresas, la adopción de esta tecnología representa un diferencial competitivo esencial en la era de la digitalización financiera