Antes, el papel de los niños era solo pedir un dulce en el mercado o una marca de cereal favorita, hoy ocupan un lugar central en las decisiones de compra de la familia. Segundo levantamento inédito da Hibou, instituto especializado em monitoramento e insights de consumo,86% de los brasileños que conviven directamente con niños de hasta 14 años afirman que sus decisiones son influenciadas por ellosEl impacto es amplio, abarcando desde supermercados y paseos hasta decisiones de alto valor, comoadquisición de electrónicos, viajes y coches.
La encuesta entrevistó a más de 1.400 brasileños en mayo de 2025 y revela un nuevo orden de consumo doméstico, impulsado por la presencia digital de los niños, por sus interacciones con influenciadores y por el crecimiento de su autonomía con el celular en mano. Solo unoEl 4% de los entrevistados afirma que los niños no interfieren en ninguna de sus decisiones de compra.
Supermercado, centro comercial, entrega y… ¿banco?
Los niños dominan los espacios del día a día.73% influyen en las compras en el supermercado, 65% en centros comerciales, 51% en cafeterías, 39% en los pedidos de delivery, 30% en las visitas al cine o teatro, y28% en la elección de restaurantes tradicionalesPero el radio de influencia va más allá:El 16% también influye en las decisiones en las farmacias, 16% en tiendas en la calle, 18% en quioscos de revistas, y17% en tiendas de conveniencia.
De la galleta al coche
La lista de categorías en las que los niños influyen más es extensa y revela cómo ha cambiado la lógica del consumo.68% de los adultos afirman que los niños influyen en la compra de galletas, bizcochos y panes, 61% en yogures y quesos, y60% en dulces y aperitivos.
Algunas influencias bastante esperadas:Calzados aparecen con un 63%, seguidos porropa y accesorios (59%), paseos y eventos (55%), material escolar (47%), juguetes educativos (44%), ylibros infantiles (40%).
Llaman la atención el impacto de la influencia de los niños en áreas que antes estaban restringidas a la decisión adulta:turismo (41%), transmisión en vivo (33%), celulares y tecnología (32%), automóviles (32%), movilidad como bicicleta y patinete (24%), salud como planes y hospitales (7%)e atéproductos bancarios (3%).
El "marketing infantil" reside en YouTube
El poder de persuasión de los niños se apoya principalmente en tres pilares:personajes conocidos (55%), publicidades que ve (51%)yinfluencers digitales (44%)principalmente youtubers. El atractivo emocional de las marcas, el uso de colores, sabores y mascotas también son citados como factores que generan deseo(31%).
Niños con celular: quién navega, consume
La presencia digital de los niños está consolidada.El 68% de los entrevistados dice que los niños con los que conviven ya tienen su propio teléfono inteligente.Ellas usan el aparato mayoritariamente paraverán vídeos (62%), jugar con amigos (53%), intercambiar mensajes con los padres (48%)).
Compra con un clic: el consumo en la palma de la mano
El 16% de los niños ya hacen compras por sí mismos usando el celular, ya sea pidiendo iFood, comprando juegos o artículos digitales. EEl 16% tiene acceso ilimitado a internet.El gasto mensual promedio de los niños que compran por celular es deR$140,00.
Las plataformas más accedidas por ellas son:YouTube (77%), Netflix (65%), TikTok (48%), Disney + (54%), Instagram (45%), Televisión por cable (45%), entre otros.
Además del consumo: influencia sobre temas serios
El alcance de los niños dentro de casa va más allá de las marcas y productos. También llevan al entorno familiar temas relevantes:acoso escolar (65%), reciclaje de basura (61%), respeto a las diferencias (58%), protección animal (51%), racismo (43%), educación financiera (28%), inclusión (33%), acoso (19%)yidentidad de género (13%).
Educación digital: déficit en la base
A pesar del creciente involucramiento con el consumo y la tecnología,apenas el 35% de los entrevistados cree que los niños con quienes conviven están preparados para lidiar con temas como tarjeta de crédito, Pix, intereses o endeudamiento.Cuando se trata de publicidad, el escenario es aún más delicado: soloEl 24% dice que los niños saben reconocer una publicidad engañosa.
Curiosamente, los propios adultos admiten fallos en este aspecto:El 34% afirma que también pueden ser engañados por publicidad.La generación que educa todavía está aprendiendo.
Lo que vemos es que los niños están cada vez más involucrados en las decisiones de consumo, pero no necesariamente preparados para ello. Tienen autonomía digital, influencia sobre los padres y voz activa en las compras, pero muchas veces no comprenden los mecanismos detrás de lo que consumen. Lo mismo vale para los adultos. Existe un desequilibrio entre el poder de consumo que se otorga a los niños y la educación que ofrecemos para prepararlos, evalúa.Ligia Mello, CSO de Hibou.