La búsqueda de mayor rentabilidad no se resume en vender más, sino en vender de manera más eficiente. Empresas que analizan sus costos, ajustan la fijación de precios con inteligencia y eliminan desperdicios logran ampliar sus resultados sin comprometer la calidad. Según un informe del Grupo OTRS, las empresas que automatizan los procesos comerciales observan un ahorro de tiempo de hasta el 23% y un crecimiento empresarial más rápido en un 19%, demostrando cómo la optimización operativa impacta directamente en la rentabilidad.
Identificar productos más rentables y ajustar los precios
SegundoLucas Codri, fundador deGestión empresarial IZEy creador del Método IZE de Crecimiento Rentable, muchas empresas pierden dinero al no entender qué productos y servicios generan mayor retorno financiero. Antes de pensar en vender más, es fundamental saber si lo que se está vendiendo realmente genera ganancias. Un análisis detallado del margen de contribución y del punto de equilibrio es esencial para definir qué productos o servicios vale la pena mantener y cuáles necesitan ser ajustados o descontinuados, explica.
A IZE trabaja directamente con la fijación de precios estratégicos, ayudando a las empresas a definir precios que aseguren rentabilidad y competitividad. Un error común es fijar precios solo en función del costo, sin considerar factores como el posicionamiento en el mercado, la percepción de valor por parte del cliente y la elasticidad de la demanda. Las empresas que adoptan una fijación de precios estructurada logran aumentar sus márgenes sin alejar a los consumidores, complementa Codri.
Según un estudio de la Fundación Getulio Vargas (FGV), las empresas que utilizan estrategias de fijación de precios basadas en el valor percibido por el cliente logran aumentar sus márgenes de beneficio hasta en un 15%, sin perder competitividad.
Reducir residuos y utilizar tecnología para la optimización
Los desperdicios operativos son uno de los principales factores que erosionan la rentabilidad de las empresas. Procesos ineficientes, retrabajo y falta de control sobre los costos fijos pueden reducir drásticamente los márgenes de ganancia. Según un informe de McKinsey & Company, la implementación de tecnologías de automatización puede aumentar la productividad hasta en un 20%, eliminando gastos innecesarios y mejorando la eficiencia operativa.
Los softwares de gestión financiera, control de inventario y análisis de rendimiento ayudan a tomar decisiones más fundamentadas. La digitalización permite un monitoreo preciso de los principales indicadores financieros, garantizando un crecimiento sostenible y previsible, afirma el gerente.
Las empresas que aplican estas estrategias muestran que es posible aumentar la rentabilidad sin comprometer la entrega al cliente. Ajustes en la fijación de precios, eliminación de desperdicios y uso inteligente de la tecnología son pilares esenciales para las empresas que desean crecer de manera sostenible, finaliza.