Hoy en día, quien tiene un pequeño negocio necesita internet para ampliar la visibilidad de la marca, generar compromiso y facilitar la comunicación directa con los clientes. Los contenidos en video tienen mayor alcance y retención en las redes sociales y hacen que el mensaje sea más persuasivo y accesible. Además, con ellos es posible demostrar productos, servicios y valores de forma dinámica, creando conexión y aumentando la confianza del público.
Pero no siempre es fácil grabar para internet, el miedo a la exposición y a la autocrítica excesiva suelen ser barreras naturales, pero totalmente superables. Según el especialista en comunicación y oratoria con más de 15 años de estudios dedicados al tema, Giovanni Begossi, el secreto está en cambiar la relación con la cámara y transformar la grabación en una conversación genuina.
Giovanni comparte 10 consejos para que la práctica sea más natural. Confira:
1 – Transforma la cámara en tu aliada. La cámara no es un juez, sino un canal para conectar a las personas. Imagina que estás hablando con un amigo cercano y mira a la lente como si fueras esa persona. Establecer contacto visual con la cámara transmite seguridad y acerca al público. Además, cuanto más personal y natural sea tu enfoque, más fácil será soltarse.
2 – Grave sin la intención de publicar y elimina la presión del juicio externo. Al principio, haz videos solo para ti, eso ayuda a acostumbrarte a tu propia voz, expresiones y la sensación de posicionarte frente a la cámara.
3 – Practique todos los días, la habilidad de comunicarse en video mejora con la repetición. Propónte un desafío personal: graba un video corto a diario, aunque no lo publiques. En poco tiempo, notarás la evolución.
4 – Usa un guion sencillo. Anote los puntos principales que desea abordar, pero evite memorizar palabra por palabra. La naturalidad proviene de la comprensión del tema y no de la memorización.
Aceite que la perfección no existe. Los vídeos auténticos generan más conexión que los muy ensayados. Los pequeños errores forman parte de la comunicación real, ajusta lo que puedas, pero no te paralices por el perfeccionismo.
6 – Considere bloquear u ocultar a algunas personas en Instagram. Si tienes colegas, familiares o conocidos que sientes que pueden juzgarte o burlarse del contenido, considera ocultar a esas personas.
7 – Ajusta tu postura y respiración. Una postura abierta y una respiración controlada ayudan en la confianza. Antes de grabar, respira profundamente varias veces y libera la tensión de los hombros. Esto mejora la dicción y la naturalidad.
8 – Edite solo lo necesario. La edición puede ayudar, pero no exageres. Los vídeos excesivamente cortados pueden parecer artificiales. Permite que tu público vea tu verdadera forma de expresarte.
9 – Mira los videos con una mirada constructiva. Al revisar tus grabaciones, concéntrate en lo que puedes mejorar y en lo que ya está funcionando. Evite ser excesivamente crítico: la evolución viene con ajustes graduales, no con autoboicot.
10 – Comienza pequeño, pero comienza y sabe que el primer video siempre será el más difícil. No esperes el momento ideal ni el equipo perfecto. Toma el celular, presiona "record" y da el primer paso. Cuanto antes comiences, más rápido perderás la vergüenza. Y recuerda siempre: el público valora mucho más la autenticidad que la perfección.