Los e-commerces son el boom del momento, el deseo de todos los emprendedores que solo tienen establecimientos físicos y que buscan escalar sus negocios entrando en el mercado virtual con el fin de vender a los más diversos lugares de nuestro país. Pero, será que, para seguir en esta elección, su empresa tiene cimientos lo suficientemente sólidos para competir en esta avenida competitiva
En un mercado altamente globalizado, insertar su marca en este entorno digital es una estrategia fundamental para expandir el alcance de ventas, alcanzar cada vez más compradores potenciales y, consecuentemente, prospectar los beneficios corporativos sin barreras geográficas. Según datos divulgados por BigDataCorp, como prueba de esto, de más de 60 millones de empresas abiertas en Brasil, cerca de 36,35% de ellas (el equivalente a, aproximadamente, 22 millones de CNPJs, ya están vendiendo en línea
Las oportunidades de crecimiento de un negocio en este universo son enormes – sin embargo, el tamaño del brillo puede ofuscar algunos cuidados importantes que deben ser tenidos en cuenta en esta inmersión. Los consumidores son cada vez más exigentes sobre con quién compran por internet y, ante esta alta selectividad, ciertos deslices pueden hacer que las marcas pierdan clientes potenciales gradualmente
Según otro estudio realizado por Opinion Box, existen cinco causas principales que influyen, directamente, la desistência de compras en línea por consumidores: valor del envío, precios altos, plazo de entrega largo, UX mala en el sitio o app y, por fin, atención deficiente en los canales digitales. Puntos aparentemente simples, más que, con certeza, harán toda la diferencia para el éxito o fracaso de un e-commerce
Considerando este escenario, uno de los puntos más importantes que los emprendedores deben tener en cuenta para que su comercio en línea, realmente, factura hasta el punto de pagarse y conseguir algún beneficio inicial para su propietario, es la creación de bases lo suficientemente fuertes que estructuren el desarrollo de la tienda virtual para la conducción de su viaje. Eso es porque la falta de ellas, incluso un buen trabajo de marketing en conjunto, puedes hacer que, en ciertos nichos de mercado, los posibles clientes lleguen al sitio a través de anuncios, pero no completen su compra
Aún, las condiciones de pago, diferenciación de la marca, estudio de competidores, tono de voz e identidad visual definidas, así como la persona que es su público, tampoco pueden quedar fuera de este proceso. Hasta porque, en la eventualidad de que incluso uno de esos puntos citados no esté alineado, es posible que la facturación caiga drásticamente, porque, al final de todo, cada engranaje de esta máquina que es el “e-commerce” debe estar ubicado precisamente, de modo que no se presenten problemas en los primeros meses
Aquellas que desean digitalizar sus negocios deben priorizar los puntos mencionados arriba, de manera que, en la inminencia de cualquiera de estos riesgos, consiga arreglarlos a tiempo para que, así, pueda aventurarse por los mares del e-commerce. Eso, además de evitar inversiones que, posiblemente, serían desechados al llegar con las manos vacías a este campo de batalla que es el entorno digital, minimizará las posibilidades de que su consumidor pase por una experiencia negativa que dañe su imagen en el mercado ante socios y futuros compradores
Lo que no debemos, como profesionales de marketing, es vender ideas ilusorias que serán inalcanzables para nuestros clientes. Al fin, sin la ganancia del cliente, quién pagará por nuestros servicios, no es cierto