En el mundo corporativo actual, en el que la digitalización de las interacciones y conexiones se ha vuelto prevalente, la presencia activa y estratégica en las redes sociales se ha consolidado como un pilar fundamental para la creación de discursos y el posicionamiento empresarial. Plataformas como Facebook, Instagram, X y TikTok se convirtieron en escenarios donde las corporaciones construyen y moldean sus reputaciones y narrativas como marcas.
Sin embargo, hay un punto ciego evidente que muchas empresas parecen tener en común: el poder de LinkedIn. Mientras que las otras redes son objetivos recurrentes para las campañas de marketing y compromiso, la plataforma orientada a los negocios a menudo termina siendo relegada a un segundo plano, siendo vista solo como un portal destinado al reclutamiento.
Además, es importante tener en cuenta que, tratándose de Brasil, el poder de esta herramienta se vuelve aún más significativo, ya que el país es el tercer mercado más grande en volumen de usuarios en el planeta, con más de 75 millones de profesionales registrados, según un estudio realizado por LinkedIn.
Cabe destacar además que, desde la adquisición de la red por parte de Microsoft en 2016, la base de usuarios de la plataforma más que se duplicó a nivel mundial, pasando de 433 millones a 1 mil millones en 2024. Hoy, la red presenta más de 23 mil millones de conexiones y suma un promedio de 130 nuevos profesionales inscribiéndose cada minuto.
Ante este escenario, la percepción aún limitada de la plataforma es un error notablemente perjudicial. Con muchas liderazgos manteniendo el estigma de que LinkedIn sirve únicamente para la publicación de ofertas de empleo, su capacidad termina reducida solo a la captación de talentos.
Esta visión equivocada omite las verdaderas fuerzas y propiedades inherentes a la plataforma, como la de explorar conocimientos del mercado, presentar la cultura organizacional y los entresijos de los negocios, además de señalar tendencias y conocimientos de los más diversos segmentos de actuación.
Pilar reputacional
El hecho es que LinkedIn trasciende, y mucho, la mera exposición de ofertas de empleo y currículums. A partir de una estrategia de comunicación sólida y bien construida, la red social se presenta como un espacio imprescindible para la creación y fortalecimiento de la reputación de una marca, además de narrativas que posicionen a la compañía como líder y referencia en su mercado.
Más que eso, la herramienta también desempeña un papel esencial en la consolidación de una marca empleadora para la empresa, con el objetivo de atraer nuevos talentos calificados y el reconocimiento de la contribución de los colaboradores actuales.
Cabe destacar, sin embargo, que las estrategias de contenido optimizadas no deben estar restringidas únicamente a la página institucional de la marca, sino también a los perfiles de los gestores y ejecutivos de la institución a partir de acciones bien elaboradas de liderazgo de pensamiento.
Para tener una idea de la importancia de este recurso, el informe de este año (2024) de Edelman sobre el impacto del liderazgo en LinkedIn revela que tres de cada cuatro tomadores de decisiones en todo el mundo priorizan marcas que presentan líderes con autoridad reconocida en el mercado frente a otros factores de elección, como el propio marketing de la empresa.
Conexiones ideales
Todo ese potencial asociado a LinkedIn se debe a que el público de la plataforma es único y extremadamente calificado para el entorno corporativo, especialmente para negocios B2B o corporaciones interesadas en atraer a los mejores talentos del mercado. Porque, en comparación con las demás redes, LinkedIn es la única que ostenta una temática global única, que es el entorno "profesional".
De esta manera, la plataforma representa un ecosistema bastante valioso para la construcción de reputación y una autoridad corporativa relevante, ya que este es un espacio que habla sobre el mercado laboral justamente para y por quienes forman parte de él.
Por lo tanto, en el contexto actual, no hay manera de negar la importancia de LinkedIn como un canal fundamental dentro de las estrategias de posicionamiento de las marcas, siendo capaz de capitalizar los puntos fuertes de una comunicación dirigida a un público cualificado y especializado.
Ignorar esta herramienta no es solo una oportunidad perdida; es un desvío que puede perjudicar, o incluso costar, la percepción y estima de una marca por parte de los stakeholders, clientes y el mercado en general. Construir una reputación sólida no es una tarea sencilla, pero se vuelve menos complicada si los líderes y ejecutivos saben elegir las estrategias y caminos que presentan mayor impacto.