En un mercado cada vez más competitivo y centrado en la experiencia del cliente, los eventos corporativos han dejado de ser simples reuniones puntuales para convertirse en plataformas estratégicas de branding. Esta es la opinión de Eduardo Zech, director de marketing y operaciones de Panda Inteligência em Eventos, empresa especializada en la creación de experiencias corporativas enfocadas en el desarrollo de marca.
“Trabajamos con el objetivo de marca del cliente como guía principal, observando sus atributos, valores, comportamientos y mensajes clave que desea transmitir”, explica Zech. Según él, cada detalle de un evento, desde la escenografía hasta el lenguaje visual, puede y debe utilizarse como punto de contacto emocional con el público, reforzando el posicionamiento y los valores de la marca.
Para Panda, la planificación de eventos comienza con un análisis profundo de la identidad y el momento estratégico del cliente. A partir de ahí, se crean experiencias sensoriales, visuales e interactivas que buscan no solo visibilidad, sino también una auténtica experiencia de marca. "La idea siempre es generar relevancia, diferenciación y aumentar el impacto mediante la generación de una reputación positiva", afirma el ejecutivo.
De lo físico a lo digital: La empresa también invierte en estrategias digitales para ampliar el alcance de los eventos y prolongar su impacto. «Planificamos el contenido antes, durante y después del evento mediante una estrategia de contacto. Además, nos centramos en experiencias instagrameables, colaboraciones con influencers, hashtags y activaciones digitales», afirma Zech.
Esta integración entre lo físico y lo digital, denominada experiencia phygital, es considerada por Panda como una tendencia esencial para los próximos años. «Los eventos presenciales siguen siendo insustituibles para crear conexiones humanas. Pero hoy en día, lo digital amplía el alcance y la longevidad del evento. Creemos que lo presencial y lo digital van de la mano para crear experiencias completas», enfatizan.
Branding con resultados: Construir una marca a través de eventos no es improvisado, sino que requiere planificación y medición de resultados. Panda utiliza análisis de datos, benchmarking, KPI e incluso indicadores de impacto local para evaluar el éxito de sus proyectos. "Medimos todo, desde la interacción, las interacciones en las activaciones y la percepción de la marca, hasta el desarrollo territorial, como la creación de empleo y los ingresos locales", afirma Zech.
Casos como los proyectos realizados para Anglo American y Localiza ilustran el poder de los eventos como herramienta de posicionamiento. En el segundo caso, según Eduardo, el concepto creado para el evento estaba tan alineado con el propósito de la empresa que fue decisivo para elegir a Panda como agencia responsable.
Cultura de marca: Para las empresas que aún no utilizan los eventos como herramienta de branding, el mensaje de Panda es claro: empezar con un propósito. «Antes de pensar en el formato, piensa en el porqué. ¿Qué mensaje quieres transmitir? ¿Qué sentimiento quieres generar?», aconseja Zech. Y concluye: «Los eventos se viven con el cuerpo, con la emoción y con los sentidos. Cuando una marca ofrece una experiencia especial, deja de ser solo un nombre y empieza a ocupar un lugar en la memoria emocional del público», asegura.
