La recuperación judicial es uno de los signos más preocupantes de que una empresa enfrenta serios problemas financieros. Para no llegar a este punto, es fundamental que las pequeñas y medianas empresas (PYME) gestionen sus finanzas de manera inteligente y estratégica. Las Fintech han jugado un papel crucial en este proceso, ofreciendo soluciones que ayuden a las empresas a evitar crisis financieras extremas.
La gravedad del problema se hace evidente en el reciente registro de solicitudes de reorganización judicial realizadas por estas empresas. En julio, las PYMES registraron 166 solicitudes, lo que representa 72,8% del total de 228 solicitudes realizadas por empresas de todos los tamaños, el resultado más alto del mes desde el inicio de la serie histórica de Serasa Experian en 2005.
Estas cifras ponen de relieve la falta de una gestión financiera sana, que lleva a muchas PYME al límite de sus capacidades, obligándolas a buscar protección judicial para renegociar sus deudas. Las fintechs ofrecen un enfoque más eficiente y personalizado de la gestión financiera, permitiendo a las PYME organizar mejor sus flujos de efectivo y realizar una administración responsable de sus compromisos. A través de herramientas innovadoras, estas empresas ayudan a las PYME a comprender sus finanzas en detalle y tomar decisiones basadas en datos, lo cual es esencial para evitar pagos atrasados, incumplimientos y la necesidad de recurrir a la recuperación judicial.
La gestión crediticia eficaz es esencial, especialmente para las pequeñas y medianas empresas (PYME), ya que el acceso a la financiación suele depender de la claridad y precisión del estado de flujo de caja. Las empresas que no pueden mostrar sus resultados enfrentan claramente dificultades para obtener préstamos de bancos y otras entidades financieras. entidades. Cuando se necesita crédito, a menudo viene con tasas altas, como sobregiros o capital de trabajo, que pueden comprometer la salud financiera del negocio.
Con condiciones de pago más flexibles y tasas de interés reducidas, las PYME pueden mantener un flujo de caja saludable, fortalecer sus relaciones comerciales y centrarse en el crecimiento empresarial sin la preocupación constante por las crisis financieras. En Brasil, donde aproximadamente 8 millones de empresas son PYME que representan el 30% del PIB, pero reciben sólo el 7,5% del crédito disponible, el desempeño de las fintechs se vuelve esencial para mejorar esta discrepancia y fomentar el desarrollo económico del sector.
Con un enfoque innovador y personalizado, Justa y otras fintechs están transformando la forma en que las PYMES manejan sus finanzas, asegurando que estas empresas tengan el apoyo que necesitan para crecer y prosperar. El sistema “dividido”, que automatiza la división de pagos en transacciones comerciales, permite dividir automáticamente el monto pagado en una sola transacción entre las diferentes partes involucradas, garantizando seguridad y ahorro de tiempo para los participantes.
Split es especialmente útil para las PYMES que necesitan garantizar pagos recurrentes y evitar la doble imposición. Por ejemplo, cuando un cliente realiza una compra en una tienda, el importe se puede dividir en tiempo real entre el establecimiento y el proveedor de servicios, sin necesidad de pasos adicionales ni procesos manuales. Este sistema es un reflejo del avance tecnológico en los medios de pago y ayuda a reducir el riesgo de impago, proporcionando una gestión financiera más eficiente.
*Eduardo Vils es presidente de fintech Justa, cuya misión es hacer el mercado más Justo.