El perfil del apostador brasileño experimentó una visible transformación en los primeros meses de 2025. Si antes el sector estaba dominado mayoritariamente por hombres jóvenes, hoy hay una importante expansión de grupos de edad, clases sociales y participación femenina. El movimiento del mercado sigue el crecimiento de la base de usuarios de apuestas deportivas en el país, impulsado por la regulación del sector, nuevas campañas de marketing y la difusión de contenidos educativos que atraen perfiles previamente ajenos a este universo.
Según una encuesta de la Secretaría de Premios y Apuestas, Brasil ya cuenta con 37 empresas autorizadas para operar en el segmento. Esta formalización dio más seguridad jurídica y digital al consumidor, además de estimular campañas publicitarias más amplias, que contribuyeron directamente a la diversificación del público.
Ricardo Santoscientífico de datos y fundador de Deportes FullTrader, señala que la base de apostadores se está volviendo más heterogénea y exigente. “Hemos notado una migración de perfiles curiosos hacia apostadores más estratégicos. Las plataformas están invirtiendo en usabilidad, datos en tiempo real y características que sirven tanto al usuario principiante como al avanzado”, evalúa.
Participación y crecimiento femenino en las clases medias
La entrada de las mujeres en el universo de las apuestas representa uno de los cambios más visibles en este escenario. Un estudio del Locomotive Institute señaló que las mujeres ya representan 47% de apostadores en el país, con gran adherencia entre los 30 y 49 años. Este cambio impacta directamente en la forma en que las plataformas desarrollan sus interfaces, campañas y comunicación. Ricardo señala que este crecimiento trae nuevas perspectivas de análisis de comportamiento. “El público femenino tiene un patrón de decisión más racional y estratégico, que influye incluso en los algoritmos de recomendación. Se trata de perfiles menos impulsivos y más conectados con datos de desempeño”, señala.
Otro fenómeno destacado es el aumento del número de apostadores de clase media. El acceso facilitado a través de aplicaciones, plataformas con pagos PIX e interfaces más intuitivas han atraído a usuarios que antes mantenían su distancia del sector. La promesa de control, los límites de depósito y la posibilidad de apuestas de bajo valor han contribuido a reducir el estigma de que apostar requiere grandes cantidades o experiencia previa.
Las plataformas adaptan funciones para nuevos perfiles
Con el cambio de perfil de consumidor, las empresas de apuestas han invertido mucho en tecnología y personalización. Además de los mercados deportivos tradicionales, es posible seguir apuestas en vivo, estadísticas automatizadas e incluso tutoriales para nuevos usuarios. Ricardo señala que el uso de la inteligencia de datos es fundamental para atender estas demandas. “Hoy se da cada clic, tiempo de permanencia y preferencia de apuesta. Las plataformas que saben utilizar esta información salen adelante ofreciendo experiencias personalizadas que retienen al usuario”, analiza.
Este avance, sin embargo, requiere atención a las prácticas de juego responsable. Con el aumento de la base de usuarios, es fundamental que las empresas ofrezcan mecanismos de protección contra las apuestas compulsivas, como la autoexclusión, límites personalizados y advertencias de uso excesivo. Además, los expertos sostienen que la educación financiera debe ir acompañada de la popularización del sector, evitando que nuevas audiencias se expongan a riesgos sin una adecuada comprensión del funcionamiento del mercado.
La evolución del perfil del apostador brasileño en 2025 muestra que el sector ha pasado de ser un nicho a convertirse en una industria del entretenimiento de masas digital. Con una audiencia más diversa, informada y conectada, el futuro de las apuestas online dependerá de la capacidad de plataformas para combinar tecnología, personalización y responsabilidad en sus operaciones.