Programado para el 29 de noviembre, el Black Friday de 2024 promete un importante movimiento comercial, con 66% de brasileños planeando comprar, según uno de ellos buscar de Wake en colaboración con Opinion Box. Las cifras todavía muestran que el comercio electrónico es el canal preferido de 58.2% de consumidores, seguido de los mercados (47.8%) y las aplicaciones (44.3%). Además, según datos recopilados por Confi.Neotrust, se espera que la facturación de la fecha de este año alcance los 9.300 millones de rands, un aumento de 9,1% respecto al año pasado.
Estos datos señalan una importante oportunidad para los minoristas, pero especialmente para aquellos que aún se adaptan al comercio online, el tiempo de preparación para satisfacer esta creciente demanda ya es corto. Leonardo Moreira Gomes, director general de Tiempo de pago, una startup especializada en pagos digitales, explica que lo ideal es que los emprendedores comiencen a prepararse con unos seis meses de anticipación.“Esto garantiza que las transacciones sean ágiles, seguras y confiables durante los picos de ventas”, afirma.
Sin embargo, el CEO señala que incluso para aquellos que no pudieron planificar, existen salidas rápidas y eficientes.“Existen plataformas y sistemas que pueden poner una tienda online en menos de 24 horas, permitiendo ajustes rápidos y un funcionamiento funcional a tiempo para Viernes Negro”, añade.
El mayor desafío para quienes ingresan al comercio en línea de última hora es garantizar que la plataforma de ventas admita el gran volumen de accesos impecables, así como organizar el inventario y las entregas. La sobrecarga en los sistemas de pago y el mayor riesgo de fraude también son preocupaciones que no pueden ser ignorado.
“Para hacer frente al aumento del tráfico y las transacciones, es fundamental contar con métodos de pago integrados que ofrezcan un alto índice de conversión y seguridad en las operaciones”, explica Leonardo. El CEO refuerza que una experiencia de pago fluida, sin redireccionamientos innecesarios, reduce la tasa de abandono del carrito y proporciona un viaje de compra más confiable para el cliente.
Al mismo tiempo, las medidas de seguridad, como sistemas antifraude sólidos y autenticación rápida, se vuelven fundamentales para mantener estable el funcionamiento en línea.“Aunque estas integraciones y ajustes técnicos pueden parecer complejos, las soluciones API modernas permiten una implementación ágil, lo que hace factible adaptar el comercio electrónico a las exigencias de un Black Friday incluso con plazos ajustados”, detalla. Un consejo más es utilizar soluciones ya probadas y listas para la integración, lo que permite organizar el flujo de pagos online, garantizando un funcionamiento robusto y seguro.