Con el empeoramiento de la crisis climática, las regulaciones ambientales son cada vez más estrictas. La Resolución 193/2023 de la Comisión de Valores (CVM), por ejemplo, exige que las empresas que cotizan en B3 publiquen informes de sostenibilidad en 2026, basados en los procesos de 2025. Además, la regulación del mercado de carbono fue sancionada recientemente por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva (PT), instituyendo el Sistema Brasileño de Comercio de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero (SBCE). El sistema sigue el modelo de límites máximos y comercio, en el que el gobierno define mil emisiones.
En este escenario, Isabela Basso, fundadora de Zaya, greentech que elabora y simplifica el cálculo del impacto ambiental de las empresas, refuerza la necesidad de adaptarse a estas normas.“Las temperaturas están aumentando, las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) siguen aumentando y muchas empresas no se mueven como deberían. La sostenibilidad debe tratarse como una máxima prioridad, tanto para el bien de los negocios como para el planeta”, afirma.
Para ayudar a las organizaciones a adaptarse a las regulaciones y no correr el riesgo de sufrir sanciones financieras y pérdida de credibilidad en el mercado, el experto enumeró tres consejos esenciales para que las empresas inicien sus viajes de descarbonización mediante la preparación de sus Inventarios de Gases de Efecto Invernadero.Verificar:
- Personalizar el inventario de emisiones
Un inventario de GEI es el diagnóstico de emisiones de una empresa. En él se evidencian las principales fuentes de emisiones, directas o indirectas, relacionadas con el negocio de la empresa. En consecuencia, también son evidentes las grandes oportunidades y prioridades de acción para reducir las emisiones.
Sin embargo, no todas las categorías de emisiones se aplican a determinadas empresas, lo que genera la necesidad de que cada una adapte el documento a su realidad. “Es importante entender qué tiene sentido para tu negocio, personalizando el inventario en base a operaciones reales y evitando datos irrelevantes”, aconseja Isabela.
Según el experto, el análisis de las categorías existentes y la identificación de aquellas que realmente están presentes en el día a día de la organización es fundamental para producir una forma eficiente. “La combustión estacionaria, que se refiere a equipos fijos como hornos y calderas, por ejemplo, puede no ser algo tan considerable en su empresa. Este tipo de <LIMPIEZA inicial, que personaliza el documento según el perfil de emisiones, simplifica el proceso y ayuda a centrar sus esfuerzos donde realmente importa”, añade.
- Involucrar a todas las áreas para recopilar datos
La recolección de datos es un proceso que muchas empresas enfrentan dificultades. De esta manera, es fundamental segmentar responsabilidades y concienciar a cada equipo del impacto de sus actividades en el medio ambiente.
“Logística, RRHH, instalaciones, todas las áreas necesitan convertirse en agentes de cambio dentro de la organización, impulsando la búsqueda de soluciones más sostenibles”, afirma el cofundador de Zaya.“Los responsables de las iniciativas de sostenibilidad deben explicar a los miembros de estas áreas el significado de la información que recopilan, demostrando que no son sólo números, sino representativos de las emisiones de la empresa”.
El experto también destaca que esta conciencia promueve un cambio de mentalidad, provocando que los empleados actúen activamente en este aspecto. “Cuando cada equipo comprende su papel en el recorrido de sostenibilidad y descarbonización de la empresa, se empieza a cuestionar procesos, identificar oportunidades y sentirse parte de la solución de forma espontánea”, destaca.
- Monitoreo mensual para ajustes rápidos
El seguimiento mensual de los informes de sostenibilidad ayuda a las empresas a detectar rápidamente tendencias negativas. De esta forma, es posible ajustar los procesos de forma continua y periódica, permitiendo identificar picos de emisiones, analizar sus causas y aplicar medidas correctoras ágiles.
“Esperar un año completo para consolidar los datos puede evitar los cambios necesarios de manera oportuna, por lo que la idea de implementar un enfoque continuo es indispensable para evitar sorpresas desagradables al final del año”, señala Isabela.
Más allá de 2025
Finalmente, el experto advierte que estos consejos no se tratan de simples “” tendencias, ya que la sostenibilidad es un proceso práctico e ininterrumpido. “En tiempos de lavado verde, es común ver empresas divulgar acciones que, en la práctica, no cambian su impacto en el medio ambiente. El verdadero cambio debe reflejarse en las cifras. Por eso, en Zaya ayudamos a las organizaciones a centrarse en lo que importa y generar resultados efectivos para el planeta y para el negocio”, concluye.