Un estudio inédito realizado por Serasa Experian, la primera y mayor datatech de Brasil, mostró que las fintechs pueden ampliar de forma segura su concesión de crédito en hasta R$ 4 millones, en promedio por fintech, a través de un modelo de repescaje de denegados; es decir, revalorizando nuevos clientes que tuvieron denegado el crédito inicialmente, pero que pueden ser elegibles con un análisis complementario. El estudio se llevó a cabo con base en la cartera de fintechs, simulando un segundo nivel de análisis complementario en la política de crédito.
En términos porcentuales, el monto medio de R$ de 4 millones representa un aumento de 20% en las aprobaciones de cada Fintech, a partir de un análisis que considera criterios sobre el prestatario que no se tuvieron en cuenta en la primera evaluación, como la tendencia de variación del Score, el historial de puntualidad de pago y el grado de severidad de las deudas. Considerando, por ejemplo, que 1/3 de la población tiene deudas de baja severidad, según la base de restrictivos Serasa, este análisis más preciso se vuelve aún más importante, ya que el prestamista podría estar rechazando a un cliente de bajo riesgo.
Para Fernando Galbiatti, director de Ofertas B2B de Serasa Experian, esta segunda mirada sobre los clientes previamente rechazados es esencial para que las Fintechs puedan aumentar los ingresos, sin coste adicional de adquisición – puesto que el cliente ya ha llegado a la empresa – y mantener el nivel de morosidad previsto en su política de crédito. “Con la repesca de los denegados, una Fintech que hoy aprueba 25 de cada 100 solicitudes de crédito, por ejemplo, puede, en una segunda evaluación, pasar a aprobar casi 30 y, con ello, tener más competitividad, ya que no deja que estos clientes se vayan a la competencia”.
Esta ampliación de la oferta de crédito no impacta las tasas de morosidad, ya que ya considera el porcentaje de riesgo previamente calculado por cada fintech. Con ello, la reprogramación de los préstamos denegados permite ampliar las ganancias, sin comprometer la seguridad de la operación.
Además, la adopción del segundo análisis también trae beneficios directos para el consumidor que, en un primer momento, tendría denegado el crédito. Al ser evaluado con mayor profundidad y, de esta forma, lograr ser aprobado, ya no necesita buscar otros acreedores o, eventualmente, aceptar intereses más altos.
Al analizar a los consumidores que fueron denegados en un primer análisis por la política de crédito del acreedor, podemos, a partir de la inteligencia derivada de información complementaria, recuperar clientes con potencial para consumir crédito, sin aumentar la morosidad. Un consumidor, por ejemplo, puede no presentar información mínima que permita el acceso al crédito, pero su CPF puede estar asociado a una MEI de la cual es socio y puede estar generando ingresos recurrentes. Este es un ejemplo de los diversos perfiles que se pueden detectar al analizar nuevamente los CPFs rechazados. Esta estrategia puede ser muy interesante, en especial para las fintech, ya que permite probar hipótesis, adoptar una estrategia más agresiva en ciertas épocas del año o expandirse gradualmente sin modificar la política de crédito vigente”, explica Fernando Galbiatti.

Los números son resultado de un estudio realizado con la solución integrada Repesaje de Rechazados utilizando como punto de partida casos de Fintechs.
El análisis se realiza mediante una evaluación estratégica e individualizada de la base proporcionada, uniendo datos exclusivos y de mercado con capacidad de inteligencia analítica, lo que permite imprimir una visión integral del potencial de sus clientes por CPF y/o CNPJ. En la solución es posible identificar al público con mayor potencial para la reestructuración sin aumentar la exposición al riesgo de la Fintech. El estudio también se ha realizado en otros segmentos, como bancos y financieras, donde se observó un importante aumento en la tasa de aprobación final.