Las prácticas de hiperpersonalización, conveniencia y automatización, ya utilizadas por grandes marcas, se están volviendo accesibles también para pequeñas y medianas empresas, gracias a la difusión de nuevas tecnologías. Según Leonardo Oda, experto en marketing y director ejecutivo de LEODA Marketing Intelligence, estas tendencias de marketing transformarán la forma en que las empresas se conectan con sus clientes y fortalecerán su presencia en el mercado en 2025.
“El consumidor es más exigente y busca experiencias personalizadas, procesos rápidos y soluciones eficientes. Quien logre entregar eso de forma estructurada se destacará el próximo año”, afirma Oda. A continuación, el especialista comparte orientaciones para poner estas tendencias en acción e impulsar los negocios.
Personalización extrema
La era del “uno para todos” quedó atrás. Los consumidores buscan productos, servicios y experiencias adaptadas a sus necesidades y preferencias individuales. Grandes marcas ya exploran esta tendencia con éxito, como Yves Saint Laurent, que utiliza inteligencia artificial para crear barras de labios personalizadas en función del tono de piel de cada cliente.
Leonardo Oda explica que, aunque ejemplos como este parezcan lejanos a la realidad de las pequeñas empresas, la hiperpersonalización ya es una realidad accesible. “Con herramientas sencillas, como la segmentación de campañas o la automatización de mensajes, las pequeñas empresas pueden crear experiencias igualmente relevantes e impactantes”, afirma.
Un comercio electrónico, por ejemplo, puede usar el historial de compras de los clientes para sugerir productos complementarios o enviar promociones dirigidas. Mensajes personalizados vía WhatsApp, chatbots que adaptan sus respuestas al comportamiento del usuario y campañas de email con ofertas específicas son también otras estrategias que acercan la marca al consumidor y aumentan la fidelización.
Para Oda, la relevancia es la clave de la personalización: “Más que invertir en grandes tecnologías, es preciso entregar algo que tenga sentido para el cliente. Cuando él se siente comprendido, la conexión con la marca se fortalece naturalmente”, dice.
Comodidad para una experiencia sin barreras
La velocidad con la que el cliente alcanza su objetivo —ya sea realizar una compra, buscar información o resolver un problema— se ha convertido en uno de los principales factores competitivos en el mercado actual. Experiencias complicadas alejan a los consumidores, mientras que procesos simples y ágiles generan fidelidad.
En el entorno digital, sitios web con registros simplificados, procesos de pago rápidos (PIX y billeteras digitales), y páginas intuitivas aumentan las posibilidades de conversión. En el entorno físico, estrategias como pedidos vía código QR, check-outs automáticos y tickets digitales optimizan la atención y valoran el tiempo del cliente.
Para Oda, ofrecer comodidad es indispensable. “La facilidad es la nueva fidelización. Si el cliente percibe que su experiencia es sencilla, no solo completa la compra, sino que crea una relación de confianza con la marca”, comenta.
Así, evaluar cada etapa del journey del comprador, identificar los puntos de fricción e implementar ajustes sencillos puede generar resultados inmediatos y garantizar que el consumidor regrese.
Automatización: más resultados con menos esfuerzo
Automatizar tareas repetitivas permite que las pequeñas empresas ganen eficiencia y concentren esfuerzos en lo que realmente importa: la innovación y la relación con el cliente.
Las herramientas de marketing y automatización son cada vez más accesibles y permiten optimizar procesos como la atención al cliente y la gestión de campañas. Plataformas como ManyChat, por ejemplo, agilizan las respuestas a preguntas frecuentes en redes sociales, mientras que soluciones como RD Station facilitan el envío de campañas de email segmentadas, adaptando el mensaje al perfil del cliente.
Leonardo Oda ejemplifica el impacto de esta automatización con una situación práctica: “Imagine una panadería que automatiza los pedidos de encargos con un formulario online integrado a WhatsApp. Esto simplifica la vida del cliente y libera al equipo para enfocarse en la producción”.
Planificación estratégica para resultados reales
Aunque la hiperpersonalización, la conveniencia y la automatización son tendencias para 2025, seguirlas sin una buena planificación puede comprometer los resultados. Leonardo Oda destaca que el punto de partida debe ser el análisis del rendimiento del último año.
Revisar datos de ventas, engagement y tráfico online ayuda a identificar qué funcionó y qué necesita mejorar. Herramientas como Google Analytics e informes de redes sociales son aliadas en este proceso. Preguntas como "¿Qué campañas generaron más retorno?" y "¿Qué canales trajeron más visitas?" guían el análisis y orientan las estrategias para el futuro.
Además, definir metas claras y medibles es fundamental. La metodología SMART —con objetivos específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con plazos definidos— ofrece la estructura necesaria para monitorizar y ajustar el progreso con el tiempo.
Un comercio electrónico, por ejemplo, puede establecer como meta “aumentar la facturación en un 20% hasta junio de 2025, invirtiendo en campañas segmentadas en Instagram y promociones dirigidas en WhatsApp”. Estas metas permiten hacer un seguimiento de los resultados de forma concreta e identificar qué debe mejorarse.
Con planificación, análisis de datos y aplicación de tendencias de marketing —hiperpersonalización, automatización y conveniencia— las pequeñas y medianas empresas pueden optimizar sus operaciones y mejorar la experiencia del cliente. “El secreto está en aprender del pasado y actuar con estrategia para construir resultados consistentes en 2025”, concluye Leonardo Oda.

