Muchas campañas estacionales fracasan porque carecen de planificación estratégica de marketing coordinador los cursos de Tecnología de Universidade Santo Amaro (Unisa) y especialista en estrategia de Marketing para el segmento B2B, Rodrigo Medici Candido.
Para el profesor, las fechas estacionales para el comercio minorista pueden proporcionar mayores ingresos a las tiendas, pero no hacen milagros sin una meta definida. “Los objetivos deben estar alineados con la evolución del negocio, por lo que se puede potenciar el periodo de estacionalidad para obtener otros resultados, además de las ventas en sí, pero para ello es necesario” planificación, señala Medici.
El coordinador advierte de los cinco conceptos erróneos más comunes cometidos por el comercio minorista en el periodo de estacionalidad:
- Falta de planificación: un plan de negocios sólido se basa en audiencias consistentes, objetivos razonables, métricas definidas y seguimiento en tiempo real. La planificación debe realizarse en base a datos previos, comportamiento del mercado y tendencias observadas, por lo que es importante tener un historial de objetivos en los que se pueda basar.
- Público objetivo: diferentes fechas solicitan audiencias específicas. A diferencia de las acciones habituales, las campañas estacionales exigen una audiencia específica, con un propósito diferente, con hábitos de consumo específicos para la época. Aunque están compuestas por las mismas personas, parece extraño pensar que sí, pero sucede que estas personas tienen una demanda de consumo diferente.
- Ignora las tendencias actuales: los tiempos cambian e Internet cambia aún más rápido. No estar al día de las tendencias actuales y no alinear la campaña con el contexto puede generar una falta de adherencia y, en consecuencia, falta de compromiso.
- Mala gestión del presupuesto de campaña: aplicar recursos en lugares innecesarios puede causar una limitación en la eficiencia de la campaña, ya sea gastando en exceso en canales no tan eficientes o gastando menos en producción de contenido.
- Evaluación inadecuada de objetivos: dar importancia a métricas vanas y no prestar atención a los resultados reales de la campaña es un error común en las fechas estacionales. Analizar los números reales de la campaña sólo trae beneficios, ya sea para medir el éxito al repetir la receta, o para aprender de los errores y tener parámetros de correcciones y ajustes finos en las campañas estacionales que vendrán.
Una planificación estratégica estructurada puede reducir los errores, ya que aporta información relevante sobre el perfil del consumidor, la definición de objetivos y métricas y la focalización de los recursos. En caso de cualquier inconsistencia, el proceso en sí identificaría los cuellos de botella que deben corregirse a través de datos en lugar de mediante chismas.