El panorama de las amenazas cibernéticas en Brasil nunca ha sido más complejo que el actual. Además de que el país es, hay que reconocerlo, un granero para piratas informáticos de todo el mundo, intensificado por un mercado paralelo de estafadores locales, los equipos de ciberseguridad deben afrontar una avalancha constante de ataques que sólo aumentan en frecuencia y sofisticación. En Brasil, un informe de Apura Cyber Intelligence señaló un aumento de 220% en ataques de ransomware en 2023, en comparación con el año anterior.
Esta avalancha de alertas e incidentes de seguridad dificulta mantener una seguridad efectiva en toda la organización. Muchas empresas no cuentan con el número necesario de profesionales de ciberseguridad para responder adecuadamente a las alertas. Según ABES (Asociación Brasileña de Empresas de Software), Brasil enfrenta un déficit de 70 mil profesionales calificados en seguridad de la información, número que tiende a crecer con la digitalización de las empresas.
La IA generativa es una herramienta potencial que las empresas pueden utilizar para escalar las ciberdefensas lideradas por humanos, y la tecnología ya está presente en varias soluciones de ciberseguridad.
Ampliar el conocimiento de seguridad con IA
La IA generativa tiene un enorme potencial en el campo de la seguridad, ya que puede ampliar el conocimiento y las mejores prácticas proporcionando orientación y pasos de remediación automatizados.
Con el uso de la IA generativa, los profesionales no tienen que centrarse tanto en enseñar una técnica de remediación específica o en instruir sobre el uso de una tecnología específica. El enfoque se centra en enseñar qué flujos de trabajo o indicaciones de IA deben utilizarse en diferentes escenarios.
Varias soluciones de ciberseguridad ya están adoptando IA generativa, mejorando los resultados de seguridad, el tiempo de remediación y la curva de aprendizaje de los analistas que operan las soluciones. Uso del procesamiento del lenguaje natural (PNL) para apoyar a los equipos de seguridad en procesos como la respuesta a incidentes, la búsqueda de amenazas y la postura de seguridad. gestión, resulta más fácil para los equipos de ciberseguridad actuales gestionar la cantidad de tareas y sistemas actuales.
Más que eso, la IA también ayuda a reducir la barrera tecnológica entre los diferentes niveles técnicos de los profesionales de DEA nivelando el conocimiento sobre tipos específicos de ataques, técnicas de remediación, plataformas de seguridad, entre otros casos.
La IA es “mágica” con automatización y análisis predictivo
Una vez “equipadas con Inteligencia Artificial, las soluciones de seguridad pueden detectar y responder a incidentes de seguridad en tiempo real, minimizando el impacto de los ataques. La automatización permite la rápida identificación de amenazas y la ejecución de medidas correctivas sin intervención humana inmediata, lo cual es vital en un escenario donde los ciberataques son cada vez más rápidos y complejos.
La IA también puede analizar grandes volúmenes de datos para predecir amenazas potenciales antes de que ocurran. Utilizando técnicas avanzadas de aprendizaje automático y acceso a casos de uso, así como bases de datos de información de ataques, es posible identificar patrones y comportamientos anómalos que pueden indicar un ataque inminente. Este análisis predictivo permite a las empresas adoptar una postura proactiva más que reactiva hacia la ciberseguridad.
Otro punto es que con Inteligencia Artificial es posible personalizar realmente las soluciones de ciberseguridad para cada empresa. Los algoritmos de IA se pueden entrenar para comprender el entorno específico de una organización y adaptar las medidas de seguridad para proteger los activos más críticos.
Finalmente, la IA ayuda a los equipos de seguridad a abordar uno de los mayores desafíos de la operación: los falsos positivos, que consumen tiempo y recursos para la verificación dual, "UNO que debe ser realizado por un humano". La IA puede ayudar a filtrar estas alertas, permitiendo a los profesionales de la seguridad centrarse en amenazas reales. Los sistemas de inteligencia artificial pueden interpretar y contextualizar alertas, lo que reduce significativamente la carga de trabajo y aumenta la precisión de las respuestas.
En definitiva, la IA es un poderoso aliado en la lucha contra las ciberamenazas, aportando eficiencia, precisión e innovación al campo de la ciberseguridad. A medida que las empresas sigan adoptando esta tecnología, estarán mejor posicionadas para proteger sus datos y operaciones contra las cada vez más sofisticadas. ataques de piratas informáticos.