El publicista Luiz Borsato encontró en el cannabis el alivio del dolor constante en la columna. Y en busca de formas más económicas y efectivas para su tratamiento, acudió en busca de autorización judicial para producir su propia medicina. Sin embargo, al principio de la práctica de la siembra sintió una falta de semillas y procedencia de calidad, con una genética mejorada que garantizara los cannabinoides que necesitaba. Allí nació Netseeds (www.netseeds.shop), un mercado de semillas dedicado a los autocultivadores brasileños, un mercado aún poco conocido, pero que ya mueve millones con la venta de productos para el cultivo de cannabis en los hogares de los pacientes.
Propietario de una agencia de publicidad en el interior del estado con 23 años de actividad, clientes importantes en áreas como agroindustria y educación y facturación anual en la casa de R$ 50 millones, Borsato tocó los dos negocios en paralelo durante algún tiempo pero pronto decidió seguir su instinto y dedicarse plenamente a brindar tratamiento médico con cannabis a los brasileños.
“Representamos en Brasil 9 marcas de semillas de algunos de los principales bancos genéticos de Estados Unidos, Países Bajos y España, donde se encuentran hoy los principales criadores del mundo. Cada planta tiene sus características mejoradas relacionadas tanto con el proceso de floración como con la producción y contenido de sustancias terapéuticas”, explica el empresario.
Su audiencia en el mercado son más de 5 mil cultivadores que, como él, tienen autorización judicial para crecer en Brasil. “Nuestro lema es 'cultivar es para todos' y con ello queremos demostrar que quienes hacen uso de la medicina cannabinoide tienen la libertad de plantar su propia medicina, con calidad, de forma segura y legal”, explica Borsato.
Antes de fundar Netseeds en mayo de 2024, el empresario ya estaba invirtiendo en el mercado internacional del cannabis, reuniendo participaciones accionarias en empresas del sector en bolsas de Estados Unidos y Canadá. Ante la oportunidad de establecerse en España, un país sin restricciones y con seguridad jurídica para el mercado legal del cannabis, Borsato optó por mantener sus operaciones fuera del país y atender al mercado brasileño y a los países vecinos latinoamericanos directamente desde Barcelona.
Además de atender a los pacientes en autocultivo, Borsato mantiene diálogos con asociaciones de pacientes e instituciones de investigación en Brasil, que enfrentan desafíos para obtener material genético rastreable y de alta calidad.“Los investigadores brasileños a menudo se ven limitados a material incautado por las autoridades, sin información genética confiable, lo que afecta el desarrollo científico y retrasa el descubrimiento de nuevas posibilidades de tratamiento con la planta. Para las asociaciones de pacientes, la genética de calidad representa la oportunidad de aumentar la productividad y la eficiencia”, señala Borsato.
La demanda mundial de semillas de cannabis medicinal ascendió en 2023 a la cifra de 404,62 millones de US$. Para 2031, el volumen de negocios proyectado es de 1.212 millones de US$, un crecimiento anual promedio de 14,7%. Borsato destaca el potencial de Brasil para convertirse en líder en este sector y también en el mayor productor de semillas para la siembra de cannabis, como en el ejemplo de otros cultivos agrícolas.“O Paraguay, vecino de Brasil, ya exporta flores industriales de cáñamo y cannabis para diferentes propósitos.