Según una encuesta de Sebrae, 8 millones de jóvenes brasileños, entre 18 y 24 años, están por delante de su propio negocio, la gran mayoría concentrado en franquicias. La ventaja de esta inversión es la posibilidad de poder contar con el apoyo de el franquiciador, contando ya con un plan de negocios establecido por otra persona y asegurando una mejor participación en el mercado.
Fabio Constantino, economista y experto en expansión de marca, señala que estos beneficios influyen en la Generación Z para desarrollar un especial interés en estas redes de servicios, especialmente en las áreas enfocadas a la salud, el bienestar, el rejuvenecimiento facial y corporal. “Una Generación Z, con su familiaridad innata con la tecnología y una visión diferenciada sobre el trabajo y el emprendimiento, está mostrando un interés creciente por la inversión en franquicias para 2024”, afirma.
La consulta demostró que la independencia financiera es una búsqueda constante entre los jóvenes, con un aumento de 10% en la adquisición de franquicias por parte de jóvenes menores de 24 años. Aunque tengan poca experiencia en el medio del negocio, este es un modelo de mercado muy adquirido porque ofrece estructura, apoyo y know-how del franquiciador, lo que facilita el camino en el emprendimiento.
Fabio dice que el franquicias ofrecen un camino sólido y estructurado para los inversores jóvenes, uniendo la innovación con modelos de negocio ya probados y consolidados.“La seguridad de invertir en una marca establecida, combinada con el deseo de marcar la diferencia, hace de las franquicias una elección natural para esta generación. La generación Z busca marcas que no sólo ofrezcan rentabilidad, sino también un propósito alineado con sus valores y estilo de vida”, concluye.