Comprender el uso de la IA generativa en productos ha transformado la relación de las personas con la tecnología, lo que ha generado conciencia sobre el potencial de la Inteligencia Artificial en el mercado, más allá de la generación de texto, como lo demuestra GPT Chat. Ante nosotros se abre la puerta a la innovación en el uso de la IA y a la comprensión de cómo esta impactará en todas las áreas de nuestra vida: ya sean las relaciones interpersonales, la vida profesional o nuestro comportamiento.
En el primer semestre de 2024, algunos de los titulares más importantes a nivel mundial se centraron en el uso de la IA, el lanzamiento de nuevas funciones o la mayor aceptación de la tecnología. Solo en este período, el 721 % de las empresas a nivel mundial adoptaron la Inteligencia Artificial, lo que representa un aumento significativo en comparación con el 551 % de 2023, según la encuesta. El estado de la IA a principios de 2024: La adopción de la IA de la generación se dispara y comienza a generar valor., realizado por McKinsey.
Los avances de GenAI en modelos de imagen y vídeo, como Sora y Gemini AI, demuestran la capacidad de la Inteligencia Artificial para generar contenido con una calidad visual altísima. Tan alta que a menudo resulta difícil distinguir entre lo real y lo digital. Este fue el caso de la declaración en vídeo de Kate Middleton sobre su salud, que se viralizó en redes sociales y generó opiniones divididas sobre si fue creada por IA Generativa, ya que la princesa confesó haber manipulado una foto que publicó el Día de la Madre del año pasado.
Las controversias con falsificaciones profundas Suscitaron inquietud en el mercado sobre la eficacia y la seguridad del uso de modelos lingüísticos para la creación dentro de las empresas. Además, pusieron de relieve la necesidad de una regulación que mantenga estándares éticos en la creación y el uso de contenido generado por IA.
Por un lado, es importante establecer estándares para el uso de estas herramientas, pero por otro, endurecer estas normas, además de limitar la creatividad de quienes usan la tecnología de forma ética, no impide que quienes quieran usarla de forma poco ética. Es la misma lógica que, por ejemplo, la clonación de tarjetas. Por muy bien que los bancos implementen medidas de seguridad y concienciación, siempre habrá quienes hagan un mal uso de la tecnología.
Sin embargo, la paradoja regulatoria no determina si la IA Generativa puede perder credibilidad en el mercado. La credibilidad siempre debe estar ligada a la calidad del resultado. Si un video, imagen o texto creado por IA está bien hecho, se ganará una buena reputación; si está mal hecho, quedará desacreditado.
Hasta ahora, hemos visto que esta tecnología ha tenido una gran acogida entre las empresas y ha dado excelentes resultados en sus aplicaciones. Esto ha generado una serie de nuevas oportunidades de negocio y la creación de nuevos productos. Un ejemplo de ello es la creación de las nuevas gafas de Apple. Visión de Apple, que integran la realidad aumentada con el mundo real y ponen en práctica la hiperconectividad: trabajo, vida personal, ocio y comportamiento. Otro ejemplo es la nueva IA de Meta, diseñada para facilitar la personalización y la eficacia de las campañas publicitarias en plataformas como Facebook e Instagram. En otras palabras, las campañas ofrecerán productos basados en lo que los usuarios ven en sus pantallas, aportando mayor asertividad al marketing.
Hoy en día, independientemente de lo que hagan las empresas, considerarán cómo usar la IA para optimizar el proceso y brindar una mejor experiencia de usuario. Esto abarca desde estrategias de ventas hasta la integración de productos, como nuevas aplicaciones y funciones para smartphones, donde la tecnología se utiliza para convencer a los usuarios de comprar el producto, crearlo y desarrollar todas las funciones que el dispositivo puede ofrecer para que los usuarios permanezcan conectados a la red, de modo que este ciclo se repita.
Es evidente que la IA está moldeando el futuro. Queda por ver qué empresas aprovecharán esta ola de oportunidades de innovación. Quienes no se adapten, sin duda, se quedarán atrás en esta carrera tecnológica.