Para muchos brasileños, el dinero guardado en la cuenta de ahorros significa seguridad, pero limita el potencial de ganancias en comparación con otras opciones de inversión. Con el avance de las soluciones digitales, nuevas herramientas que combinan seguridad y rentabilidad surgen como alternativa a este modelo. Smart Save surge como una plataforma que permite inversiones automáticas, sin complicaciones y accesible para quienes aún se sienten inseguros de arriesgar en inversiones más volátiles.
Según un estudio de la Asociación Brasileña de Entidades de los Mercados Financieros y de Capitales (Anbima), el 65% de los brasileños aún mantienen el ahorro como la principal inversión financiera. Sin embargo, esta elección a menudo puede resultar en pérdidas cuando el rendimiento queda por debajo de la inflación. Plataformas como Smart Save ofrecen una nueva forma de rentabilizar el capital sin requerir conocimientos técnicos, utilizando tecnología para transformar pequeños valores en oportunidades de rendimiento.
Marilucia Silva Pertile, mentor de startups y cofundador deIniciar Crecimientoempresa que invirtió en Smart Save para impulsar su crecimiento en el mercado, cree que la plataforma es una alternativa práctica y moderna para el público más inseguro en relación con las finanzas. "La plataforma rescata el hábito de guardar pequeñas cantidades, pero con un diferencial de rentabilidad y sin la complejidad de otras inversiones. Con el redondeo automático de valores, adapta el concepto de la hucha al día a día, promoviendo una forma segura y eficiente de ahorrar e invertir", afirma.
Soluciones que facilitan el hábito de invertir
Una de las mayores contribuciones de las plataformas digitales está en ayudar a los usuarios a crear el hábito de invertir. Aplicaciones como Smart Save permiten que el usuario comience a invertir de forma sencilla y sin presiones, permitiéndole comprender mejor su potencial financiero y sentirse más confiado para explorar nuevas oportunidades de rendimiento.
Marilucia destaca que las alternativas ayudan a las personas a formar una relación más saludable con el dinero. Estas herramientas son importantes para incentivar la recurrencia, esencial para cualquier construcción de patrimonio. El inversor que usa Smart Save siente que, incluso sin conocer todos los detalles del mercado, puede, sí, hacer que el dinero crezca. El aprendizaje financiero llega de forma orgánica, con el usuario ganando confianza en sus resultados», comenta la especialista.
Señala que el diferencial de Smart Save radica en la combinación de la tecnología con la sencillez de uso, incentivando a la población a construir un futuro financiero con un enfoque más práctico.
Transformando la visión del ahorro en Brasil
La 7ª edición del Rayo X del Inversionista Brasileño, realizada por Anbima, mostró que el 37% de la población invierte en productos financieros. La seguridad se señala como la principal ventaja para las aplicaciones financieras, mencionada por el 44% de los inversores, seguida por el retorno financiero (28%) y la liquidez (6%). Estos datos evidencian que, aunque el ahorro sigue siendo la opción más común entre los brasileños, hay una tendencia creciente hacia la diversificación de las inversiones, con mayor interés en alternativas que ofrezcan mejores rendimientos.
Con el crecimiento de fintechs y herramientas digitales, Mara cree que el brasileño comenzará a explorar nuevas formas de hacer que el dinero rinda. La integración de plataformas como Smart Save con bancos e instituciones financieras muestra que el mercado ya ve valor en simplificar el proceso de inversión, atendiendo al perfil conservador del país. Marilucia cree que, para muchos, estas herramientas representan el primer paso en un camino hacia la autonomía financiera.
"Con el uso de estas plataformas, cada vez más brasileños, incluso aquellos que se limitaban a la ahorro, comienzan a adquirir el hábito de guardar dinero de forma práctica y segura, abriendo espacio para nuevas formas de economía," comenta. Para ella, Smart Save y otras soluciones digitales son el punto de partida para una inversión accesible y gradual, sin dejar de lado la seguridad.