Celebrado durante 139 años, el 1 de mayo encuentra a los trabajadores brasileños en 2025 rodeados de sentimientos profesionales contradictorios, según una encuesta especial de Serasa. Si bien están insatisfechos con los salarios y las bajas oportunidades de crecimiento, los encuestados se muestran satisfechos con sus puestos actuales y optimistas sobre el futuro de sus carreras. Ante la incertidumbre generada por la Inteligencia Artificial, no temen tanto ser reemplazados por máquinas o tecnología. Temen más a la economía.
“Nuestra investigación refuerza la idea de que las empresas tienen un amplio margen para invertir en el desarrollo y la valoración de sus empleados”, afirma Patricia Camillo, especialista en educación financiera de Serasa. “Los empleadores o líderes que fomentan el crecimiento y fortalecen el compromiso de los empleados tendrán más éxito en la retención del talento”, añade.
Futuro y jubilación
Elaborada por el Instituto Opinion Box, la encuesta muestra que el 59% de los trabajadores se siente optimista sobre su futuro profesional en los próximos cinco años, y el 32% cree que podrá jubilarse cómodamente, a pesar de la legislación cada vez más restrictiva. Sin embargo, el 33% considera difícil jubilarse con estabilidad financiera.
La encuesta también indica que el 63% de los encuestados se considera satisfecho o muy satisfecho con su puesto actual. Sin embargo, la remuneración sigue siendo una preocupación: el 68% afirma estar insatisfecho con su salario.
Para quienes buscan nuevas oportunidades en el mercado laboral, la búsqueda de un mejor salario (32%) y una mejor calidad de vida (27%) son las principales motivaciones para un nuevo empleo. Entre los desafíos del entorno laboral actual, destacan los bajos salarios y la alta carga de trabajo.
Educación financiera en el lugar de trabajo
Según el estudio, el 83 % de los encuestados valora que las empresas ofrezcan programas de educación financiera como parte de su desarrollo profesional. Además, el 86 % cree que participar en cursos de finanzas en el trabajo contribuye a una planificación futura más sólida, y el 84 % considera esta práctica esencial para afrontar imprevistos.
Cuando los trabajadores tienen acceso a educación financiera, adquieren mayor confianza para tomar decisiones importantes sobre sus vidas y carreras profesionales. El apoyo de las empresas en este proceso es un factor diferenciador que beneficia a todos, ya que los empleados con mayor seguridad financiera tienden a ser más comprometidos, productivos y resilientes ante los desafíos, afirma Patrícia.
