El mes de julio marca el inicio del segundo semestre y las tradicionales vacaciones escolares. Por eso, una gran parte de los profesionales aprovecha el momento para tomarse un merecido descanso. Sin embargo, una práctica común y extremadamente peligrosa persiste: influenciados por el “Fear of Switching Off” (FOSO), o "miedo a desconectarse", muchos trabajadores continúan conectados al trabajo durante las vacaciones
Predominante entre los nativos digitales, el FOSO se manifiesta en colaboradores que, incluso de vacaciones, se mantienen disponibles para conversaciones a distancia y, a veces, ejecutan tareas y participan en reuniones. La creencia equivocada es que una desconexión por varios días perjudicaría el avance de las demandas y aumentaría la presión al regresar
"Creo que este comportamiento es una de las herencias de la pandemia", cuando los límites entre la vida personal y profesional prácticamente desaparecieron. Muchos profesionales comían mientras trabajaban, estipulaban el horario y llevaban pendientes para el fin de semana. Los impactos de este exceso de trabajo ya son bien conocidosagotamiento, ansiedad, insomnio, depresión, alerta María Sartori, directora asociada de Robert Half
Las consecuencias de FOSO pueden ser desastrosas
Los reflejos a medio y largo plazo de esta dificultad de desconexión tienden a ser desastrosos y están asociados a la caída de la productividad, falta de disposición, mal humor, entre otros perjuicios físicos y psicológicos. Garantizar un período de descanso total es importante para recargar las baterías y asegurar que la salud mental y física continúe en orden para la entrega de buenos resultados
El ejemplo debe venir del liderazgo
Es fundamental que las compañías no vean las vacaciones conectadas como una conducta tolerable o deseable. Una cultura organizacional que respete y valore el descanso, la salud y la calidad de vida de los trabajadores fomentan actitudes en este sentido
"Las liderazgos deben dar el buen ejemplo". Si se desconectan en las vacaciones, es probable que sus equipos sigan el mismo camino. Definir las expectativas en relación al período y compartir esta información con el resto del equipo es recomendable. Está claro que la regla es estar desconectado, todos se sentirán seguros para desconectarse, comenta a directora de Robert Half
Otra medida importante es la organización y delegación de responsabilidades durante las ausencias, lo que ayuda tanto a evitar sobrecargas y fallos como a estimular que el descanso absoluto sea visto como algo positivo, ya que los compañeros de equipo darán cobertura
Cómo afrontar la devolución de forma más ligera
Es normal que, a la vuelta de las vacaciones, los profesionales necesitan algunos días para volver a entrar en el ritmo del trabajo. A los gestores, es interesante promover una charla relajada sobre cómo fue el período de descanso, planificando los próximos pasos
Además de eso, para actualizar al profesional sobre lo que ocurrió durante su ausencia y involucrarlo en las actividades y proyectos en curso, es recomendable reunir a todo el equipo