La asamblea de este lunes (6) consolidó la transferencia del control del consejo de administración del Grupo Pão de Açúcar (GPA) a la familia minera Coelho Diniz, poniendo fin a un ciclo de 13 años de predominio del grupo francés Casino.
El nuevo consejo, integrado por nueve miembros, tendrá ahora una mayoría formada por representantes vinculados a la familia y aliados estratégicos.
Según el abogado Ramiro Becker , socio fundador de Becker Advogados , el cambio supone un hito significativo en el gobierno corporativo:
Esta medida concentra el control efectivo del consejo de administración, el órgano de decisión más importante de una empresa, en manos de la familia Coelho Diniz. Esto significa que las decisiones estratégicas clave, como inversiones, desinversiones y contratación de ejecutivos, ahora se tomarán directamente bajo su liderazgo.
Según Becker, el reposicionamiento representa "un cambio en el centro de poder del GPA, que deja de estar bajo influencia extranjera y consolida el mando nacional".

