Mark Zuckerberg, CEO de Meta, anunció el cierre de la verificación de hechos en los Estados Unidos. El ejecutivo también comunicó que el programa será reemplazado por el sistema de verificación mediante "notas comunitarias", el mismo utilizado por X (ex-Twitter).
Para Marcelo Crespo, profesor y coordinador del curso de Derecho de la ESPM, esta sustitución tiene implicaciones políticas y legales de largo alcance, incluso en Brasil. En el sistema anterior, la verificación de los hechos era realizada por terceros independientes y tenía un enfoque técnico y no sesgado. Al pasar a contar con un sistema de "notas de la comunidad" para evaluar el contenido, se puede abrir un amplio camino para la manipulación organizada por grupos con puntos de vista sesgados. En una sociedad fuertemente dividida, como Brasil, la subjetividad de los participantes resultará en una opinión mucho más favorable al contenido dividido y desinformativo y mucho menos a la discusión.
El profesor destaca que, aunque el nuevo enfoque parece innovador, no reemplaza los métodos que pueden aplicarse técnicamente para enfrentar la desinformación de manera eficaz. En Brasil, este cambio tiende a reforzar el debate sobre la responsabilidad de las empresas involucradas, haciendo que Meta sea aún más dependiente de una moderación responsable. Además, el sistema deberá ser lanzado de manera transparente y en conformidad con las normas nacionales. Esta modificación podría tener un impacto negativo significativo, tanto política como legalmente.
Bruno Peres, profesor de marketing digital de la ESPM, señala que la decisión propone un enfoque diferente para la moderación de contenido con la idea de promover una mayor libertad de expresión, pero sin la confirmación de ser un sistema eficaz. No existen pruebas, estudios o explicaciones más detalladas que lo respalden, por lo que esto genera una serie de preocupaciones sobre la eficacia de este nuevo formato para combatir la desinformación. Peres destaca que el movimiento puede tener una conexión política y que la falta de claridad en el cambio genera preocupaciones para el nuevo formato.
La decisión de Meta puede afectar la confianza de los usuarios, según Rafael Terra, profesor de marketing digital de ESPM. El profesor refuerza que el cambio puede intensificar la polarización en las redes, haciendo aún más crucial que las empresas y los individuos actúen con ética para mantener la confianza del público. Aunque el cambio fomenta una mayor participación, puede generar preocupaciones sobre la credibilidad y el control de la desinformación. Es un modelo que requiere madurez digital de los usuarios para evitar manipulaciones y sesgos. El profesor refuerza que es necesario educar a la comunidad para que este sistema funcione adecuadamente. Además, es importante estar atento, ya que la retirada de verificadores profesionales puede llevar a la amplificación de noticias falsas e información perjudicial. Eso es especialmente peligroso en contextos políticos o sensibles.