Estar en la Zona Franca de Manaus, que fue creada en 1957, puede significar exenciones importantes, como el Impuesto sobre Productos Industrializados (IPI), lo cual siempre es ventajoso para las empresas. Sin embargo, no solo existe el bono, también está la carga de tener una fábrica en la región, que está lejos de los estados más poblados y que, en consecuencia, consumen la mayoría de los productos producidos en la ZFM.
La Zona Franca de Manaus fue creada en 1957 con el objetivo de promover el desarrollo de la región mediante la industrialización y la generación de empleos. Sin embargo, algunas dificultades se han vuelto evidentes en los últimos tiempos. João Domingos, socio de BDO responsable por la filial de Manaus, destaca las dificultades logísticas que enfrentan las empresas de la región.
La mayoría de las personas no imaginan toda la logística que implica el transporte de las mercancías producidas en Manaus. El transporte por carretera y la balsa tardan, en promedio, 12 días en llegar a São Paulo, antes de ser distribuidos a otros estados.
Domingos explica que la falta de una red vial más amplia y el alto costo del transporte aéreo hacen que el transporte por ferry y camiones sea el más buscado, a pesar de que la logística sea mucho más demorada. "Estos altos costos de transporte hacen que muchas empresas reconsideren la instalación de nuevas empresas, ya que prácticamente anulan parte de los beneficios fiscales", destaca.
A pesar de todas estas dificultades, los ingresos de las empresas del Polo Industrial de Manaus han ido creciendo en los últimos años, con excepción de 2023, cuando se mantuvieron prácticamente estables. La generación de empleos directos alcanza las 112 mil, una cifra que también avanza año tras año. Se trata de una contribución innegable para la economía del país. Por eso, invertir en infraestructura y en nuevos modos de transporte para que la ZFM siga creciendo, destaca.