Empresas de todos los tamaños están apostando por la inteligencia artificial (IA) para transformar sus procesos internos y externos. Según un estudio realizado en 2024 por McKinsey, el 65% de las empresas están utilizando la IA regularmente en al menos una función de los negocios. El porcentaje revela un aumento significativo en comparación con el año anterior, cuando el 40% de las organizaciones habían adoptado la herramienta.
El levantamiento también reveló que el 50% de las empresas que adoptaron la inteligencia artificial percibieron un aumento en la productividad. El empresario Frederico Stockchneider, director de Tecnología de InfoWorker, afirma que la IA está remodelando la gestión y la rutina corporativa. Es un proceso sin retorno. Las empresas que no se adapten a los nuevos recursos perderán competitividad frente a sus competidores, porque lo que está en juego es la agilidad en la resolución de las demandas y la reducción de costos, comenta.
Stockchneider explica que existen varias soluciones de IA en el mercado y la definición del mejor recurso depende de variantes como el perfil de la empresa, área de actuación, volumen de datos disponibles, finalidad, entre otras. É cita, por exemplo, as ferramentas da Microsoft, que oferece para os seus clientes. "Las demandas cambian, de acuerdo con la necesidad de cada organización", señala.
PYMES
Ya sea en un pequeño negocio o en una multinacional, la integración de la IA en la rutina corporativa es más que una tendencia: es una necesidad. Stockchneider refuerza que la revolución de la IA no está restringida a las grandes corporaciones. Soluciones accesibles y flexibles permiten que pequeñas y medianas empresas también adopten la tecnología. "Ya sea en la atención al cliente con chatbots inteligentes o en la gestión de inventarios, la IA está ayudando a nivelar el campo de competencia", destaca.
Entre los productos más buscados de Microsoft, según él, están Power BI, que utiliza IA para proporcionar análisis de datos integrales, permitiendo a las empresas visualizar datos de manera intuitiva para orientar las decisiones estratégicas, y Azure Machine Learning, que es una plataforma de aprendizaje automático que permite construir, entrenar e implementar modelos de IA a gran escala. "Azure está indicado para organizaciones que desean aprovechar el poder del aprendizaje automático para resolver problemas complejos", aclara.
Según él, la inteligencia artificial ya es una herramienta utilizada desde hace varios años, pero que se popularizó recientemente gracias, principalmente, a soluciones como ChatGPT y Microsoft Copilot, que ayudan a automatizar tareas, proporcionar ideas y mejorar la colaboración entre los equipos. "Son recursos indicados para automatizar tareas repetitivas, analizar grandes volúmenes de datos y proporcionar ideas valiosas que ayudan en la toma de decisiones", afirma.
VALOR AGREGADO
Otra gran ventaja, destaca Stockchneider, es que la inteligencia artificial ayuda a mejorar la eficiencia operativa al optimizar procesos y reducir errores humanos. La investigación de McKinsey indicó que la IA se está adoptando con mayor frecuencia en funciones donde puede aportar valor, como en las áreas de marketing, ventas y desarrollo de productos y servicios.
Sin embargo, a pesar de los avances, la implementación de la inteligencia artificial no está exenta de desafíos. La necesidad de capacitación de los colaboradores, la integración con los sistemas existentes y las cuestiones relacionadas con la ética y la privacidad son algunos de los puntos que requieren atención. "Más que tecnología, es esencial que las empresas inviertan en educación y en la creación de una cultura organizacional adaptada a este nuevo momento", evalúa.
El director de Tecnología de InfoWorker cuenta que, incluso, este es un nicho en el que la IA ha sido muy utilizada. El Copilot, por ejemplo, es una función que ayuda a los colaboradores a trabajar de manera más inteligente y colaborativa, permitiéndoles centrarse en actividades de mayor valor añadido.