El comercio electrónico brasileño continúa expandiéndose. Según datos de la Asociación Brasileña de Comercio Electrónico (ABComm), el sector generó R$100.500 millones en ingresos en el primer semestre de 2025. Este crecimiento se sustenta en el avance de la digitalización, la diversificación de los métodos de pago y una mayor confianza del consumidor en el entorno digital.
Entre enero y junio, se registraron más de 191 millones de pedidos, con un precio promedio de R$ 540. El número de compradores en línea superó los 41 millones, lo que refuerza la relevancia del comercio electrónico como canal de consumo para diferentes perfiles y niveles de ingresos.
Para la segunda mitad del año, ABComm proyecta un desempeño aún más sólido, impulsado por eventos estacionales como el Black Friday, Navidad y eventos deportivos internacionales, así como por el impacto positivo de Drex, el real digital del Banco Central, que debería ampliar la inclusión financiera y facilitar las transacciones.
Para Fernando Mansano, presidente de ABComm, el panorama apunta a un crecimiento sostenible y oportunidades para todo el ecosistema minorista. «El comercio electrónico brasileño atraviesa un período de consolidación e innovación. Las empresas invierten en experiencias de compra, logística y nuevas tecnologías, mientras que los consumidores confían cada vez más en el entorno digital. Esta combinación fortalece al sector y amplía su papel en la economía nacional».
En general, el desempeño del primer semestre refuerza la fortaleza del comercio electrónico en Brasil y su capacidad de adaptación a las nuevas demandas de los consumidores. Con innovación constante y estrategias centradas en la conveniencia, la seguridad y la personalización, el sector se consolida como uno de los principales impulsores del crecimiento del comercio minorista, allanando el camino para un segundo semestre con resultados aún más positivos.