En el escenario donde la conveniencia de recibir productos en casa nunca ha sido tan valorada, es imposible ignorar los impactos ambientales de esta práctica, especialmente en lo que respecta al transporte y al uso excesivo de envases. Sin embargo, una serie de iniciativas está surgiendo, buscando mitigar esos efectos y transformar el delivery en un modelo más ecológico y responsable
En medio de un proceso de transformaciones que acompañan las nuevas necesidades de los consumidores, los emprendedores también enfrentan una creciente presión para adoptar prácticas más sostenibles. Esto incluye, por ejemplo, el uso de transportes no contaminantes para reducir las emisiones de carbono y la implementación de estrategias para minimizar la generación de residuos, alineando sus negocios a una economía más verde y consciente, comenta Vinícius Valle, coordinador de marketing de Gaudium, startup enfocada en los mercados de movilidad y logística
Uno de los mayores avances en este proceso es la adopción de bicicletas y motos eléctricas. Vehículos movidos a combustibles fósiles, que contaminan el medio ambiente con emisión de gases nocivos, están siendo reemplazados por opciones eléctricas, más eficientes y menos perjudiciales para el medio ambiente. Al lado de las bicicletas, esas motocicletas no solo ayudan a reducir la emisión de carbono, pero ofrecen el beneficio de ser más silenciosas — lo que disminuye, todavía, la contaminación sonora.
El sector también ha invertido en envases más sostenibles, sustituyendo el plástico por materiales biodegradables o compostables, que se descomponen más rápido y tienen menor impacto ambiental. Además de eso, algunas empresas utilizan envases reutilizables con sistemas de devolución, incentivando la economía circular y reduciendo el desperdicio
Estas transformaciones están moldeando un nuevo panorama para el sector, en la cual sostenibilidad e innovación van de la mano. Al adoptar prácticas más ecológicas, las empresas no solo están atendiendo a una demanda creciente por opciones más responsables, pero también contribuyendo a un futuro más sostenible, finaliza Valle