La Generación Z, individuos nacidos aproximadamente entre 1997 y 2012, está revolucionando la forma en que enfrentamos la vida profesional y la jubilación. A diferencia de las generaciones anteriores, que seguían trayectorias lineales hasta la jubilación tradicional, los jóvenes de hoy están adoptando el concepto de "microjubilación": pausas planificadas durante la carrera para vivir nuevas experiencias y centrarse en el bienestar y el crecimiento personal.
Además de la inmersión digital, la Generación Z creció en medio de crisis económicas globales, inestabilidad política y cambios rápidos en el mercado laboral. Estos factores moldearon una visión más cautelosa y pragmática sobre el futuro, impulsando la búsqueda de flexibilidad y seguridad financiera descentralizada. Este contexto explica, en parte, la preferencia por múltiples fuentes de ingreso y el enfoque en micropensiones a lo largo de la vida.
Según Carla Pinheiro, jefa de Operaciones de Quanta Previdência, estos jóvenes prefieren no esperar décadas para disfrutar de la vida, optando por intervalos entre empleos para descansar y explorar nuevas oportunidades.
Priorizan la salud mental, el crecimiento personal y las experiencias significativas, en lugar de centrarse únicamente en la longevidad y el desarrollo profesional. Esta tendencia refleja un cambio de paradigma, donde la calidad de vida y la satisfacción personal cobran protagonismo», destaca el experto.
Este nuevo concepto de microjubilación también desafía a las empresas y empleadores a repensar sus políticas de beneficios y retención de talentos. Los programas tradicionales de previdencia y los planes de carrera lineales pueden volverse menos atractivos para estos jóvenes, exigiendo formatos más flexibles y adaptables a sus expectativas de pausas estratégicas y experiencias variadas a lo largo de la vida profesional.
Conectado y flexible
Con el modelo tradicional de carrera siendo cuestionado, la Generación Z opta por el emprendimiento digital, el trabajo independiente y los trabajos temporales para lograr mayor flexibilidad y diversificación de ingresos. "La seguridad financiera para esta generación ya no está vinculada a un solo empleo fijo, sino a la capacidad de generar ingresos por diferentes medios", destaca Carla.
Formado por jóvenes en inicio de carrera o recién graduados de la universidad, este grupo posee un nivel de interés y conocimiento por encima de la media.La tecnología también desempeña un papel central en este nuevo comportamiento, funcionando como aliada directa en la planificación financiera.
Según datos presentados por Anbima (Asociación Brasileña de Entidades Financieras y del Mercado de Capitales) en la séptima edición deRadiografía del inversor, El 66% de estos jóvenes tiene cuentas en bancos digitales y evita la atención presencial, prefiriendo plataformas intuitivas y accesibles.
Las aplicaciones permiten seguir las inversiones en tiempo real, establecer metas personalizadas e incluso programar contribuciones variables, adaptando la planificación según períodos de mayor o menor ingreso. Esta combinación de tecnología y personalización hace que la planificación financiera sea más accesible y esté conectada con la realidad de quienes buscan libertad y seguridad al mismo tiempo.
Según datos del Radar del Inversionista Brasileño, en el campo de las inversiones, la tradicional libreta de ahorros pierde terreno frente a nuevas opciones. Mientras que el ahorro sigue siendo la opción principal para la mayoría de los inversores de 28 años o más, la Generación Z busca alternativas más dinámicas. Solo el 3% invierte en criptomonedas, el 6% opta por fondos de inversión y el 10% recurre a influencers digitales para orientación financiera.
A pesar de la fuerte presencia digital, estos jóvenes están demostrando un enfoque más proactivo en relación con la planificación financiera, valorando los consejos de familiares y personas cercanas. "Hay un equilibrio entre la búsqueda de información en plataformas digitales y la confianza en opiniones tradicionales. Están aprendiendo de las generaciones anteriores y aprovechando mejor las opciones disponibles para ahorrar y alcanzar sus objetivos de jubilación", explica Valter Macena, analista de inversiones de Quanta.
Soluciones y tendencias del mercado
Para apoyar esta nueva perspectiva de jubilación, instituciones como Quanta Previdência ofrecen soluciones alineadas con las necesidades de la Generación Z. «Es fundamental que los jóvenes cuenten con herramientas flexibles y accesibles para planificar sus microjubilaciones, garantizando su seguridad financiera sin renunciar a la libertad que anhelan», afirma Carla.
Como alternativa en el mercado, el plan Cooprev surge como una opción innovadora, permitiendo contribuciones personalizadas y gestión facilitada a través de plataformas digitales. Esto permite que los jóvenes planifiquen sus pausas estratégicas sin comprometer su estabilidad financiera.
Con una visión más pragmática de las finanzas, la carrera y el consumo, la Generación Z está configurando un futuro económico dinámico, en el que la tecnología y el conocimiento son herramientas esenciales para la gestión financiera.