El comportamiento del consumidor ha cambiado, y la comida rápida también está cambiando. Antes, o éxito en el sector dependía de grandes cocinas, menús extensos y salones concurridos; hoy, quienes lideran la transformación son las marcas con operaciones compactas, gestión eficiente y enfoque total en agilidad y conveniencia.
Según el estudioFoodservice Brasil 2025, realizado por la consultora Galunion en colaboración con el Instituto Qualibest, el 66% de los brasileños prefieren marcas que ofrecen comidas prácticas, sabrosas y sin burocracia. Este dato refuerza un cambio en el mercado: el ascenso de lo que los especialistas ya llaman "nuevo fast food brasileño", un modelo más ligero, accesible y alineado con los hábitos actuales.
Más que vender comida rápida, estas franquicias venden experiencias simples, bien ejecutadas y de fácil replicación, con un ticket medio competitivo y potencial de escala. Y están conquistando tanto a consumidores como a inversores.
A continuación, conozca cuatro marcas que están a la vanguardia de este movimiento.
Locos por Coxinha
Con un formato de tienda compacta, ticket medio popular y atractivo afectivo, Loucos por Coxinha es un ejemplo de cómo un producto típico puede convertirse en una marca de éxito. La franquicia ofrece una operación simplificada, fácil de replicar y con alta rotación, ideal para centros comerciales, puntos en la calle y entregas a domicilio. Hoy, es una de las redes que más crece en el segmento de snacks.
- Inversión inicial total estimada: a partir de R$ 131 mil
• Facturación media mensual: a partir de R$ 40 mil
Plazo de retorno: de 12 a 30 meses
Italia en el box
Italia en el Box apostó por la reinvención de la tradicional cocina italiana con enfoque en logística y entrega. Sus masas llegan al cliente en envases inteligentes, que preservan la temperatura y la textura. Con operación optimizada y un menú estandarizado, la marca combina comodidad, sabor y rendimiento, tres pilares de la comida rápida moderna.
- Inversión inicial: R$120 mil (incluyendo tarifa de franquicia)
- Facturación media mensual: R$ 100 mil
- Tiempo de retorno: 18 meses
Tastefy
A Tastefy (Antiga ATW Delivery) opera como una dark kitchen compartida, donde diferentes marcas — como Number One Chicken y Brasileirinho Delivery — funcionan dentro de una única estructura. Esto permite escalar los ingresos por metro cuadrado, optimizar el equipo y mantener los costos bajo control. La empresa invierte en IA, menús adaptables y procesos ágiles, siendo referencia en innovación en el sector de la alimentación.
- Inversión inicial total estimada: R$299 mil (incluyendo tarifa de franquicia)
- Facturación mensual promedio: R$240 mil
- Plazo de retorno: 12 a 24 meses
Batido Polar
Con tiendas en los Estados Unidos y control directo desde Brasil, Polar Shake creó un modelo de gestión externalizada que atrae a inversores interesados en facturar en dólares sin salir del país. La franquiciadora se encarga de la operación, el equipo, el inventario y el cierre mensual — el inversor supervisa todo a distancia. El producto también se destaca por su estética y atractivo para Instagram, con enfoque en turistas y jóvenes adultos.
- Inversión inicial total estimada: a partir de R$ 220 mil
- Facturación mensual promedio: de R$100 a R$120 mil
- Plazo de retorno: 24 a 30 meses