A partir de 2026, Brasil implementará una reforma tributaria histórica, introduciendo dos nuevos impuestos indirectos que modernizarán su sistema fiscal. Este cambio traerá la Contribución sobre Bienes y Servicios (CBS) del 8,8%, un tributo federal, y el Impuesto sobre Bienes y Servicios (IBS) del 17,7%, de ámbito estatal y municipal. Ambos funcionarán de manera similar al Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), alineando a Brasil con las mejores prácticas internacionales.
Un aspecto crucial de esta reforma es la tributación de proveedores de servicios digitales no residentes. Esta medida busca igualar la competencia entre empresas extranjeras y nacionales, eliminando una ventaja fiscal que favorecía injustamente a las entidades no residentes. El nuevo régimen tributario abarcará una amplia gama de servicios electrónicos, incluyendo publicidad digital, transmisión de contenido, aplicaciones, software y servicios de internet.
Panorama del comercio electrónico en Brasil
El mercado digital brasileño presenta un escenario robusto y en expansión. Con 207 millones de usuarios de internet, el país está cerca de la quinta etapa de desarrollo del comercio digital, caracterizada por la normalización de las ventas en línea de productos perecederos y la presencia de múltiples marketplaces bien establecidos.
El sector B2B domina el espacio digital, superando al B2C por tres veces. A pesar de los desafíos económicos recientes, el PIB brasileño mostró resiliencia, alcanzando el 2,9% en 2023, con proyecciones del Banco Mundial que apuntan a un crecimiento más moderado del 1,7% hasta finales de 2024.
El comportamiento del consumidor brasileño es particularmente favorable al comercio electrónico. Los datos del Informe Digital Global 2023 de Meltwater indican que el 59,2% de los usuarios entre 16 y 64 años realizan compras en línea semanalmente. Además, el país lidera en tiempo dedicado en línea a actividades como juegos, redes sociales y transmisión de contenido.
Marco regulatorio y cumplimiento
El entorno regulatorio brasileño para el comercio digital evoluciona de manera consistente, aunque la implementación puede ocurrir a un ritmo diferente al observado en Europa. El país cuenta con una estructura legal sólida, que incluye legislaciones sobre transacciones electrónicas, protección de datos, lucha contra los delitos cibernéticos y defensa del consumidor.
Las empresas que operan en el mercado brasileño deben estar atentas a las expectativas de los consumidores, que están acostumbrados a un alto nivel de protección legal. El cumplimiento de las regulaciones locales es esencial para el éxito en el mercado.
Perspectivas de crecimiento e impacto económico
El comercio electrónico ha revolucionado el comercio minorista global, proporcionando a las marcas alcance internacional y ofreciendo a los consumidores una conveniencia sin precedentes. Las proyecciones de Statista indican que las ventas globales de comercio electrónico minorista superarán los 8 billones de dólares para 2027, un crecimiento significativo en comparación con los 2,3 billones de dólares registrados en 2017.
En América Latina, se espera que las ventas en línea alcancen los 160 mil millones de dólares para 2025, con Brasil, México y Argentina representando el 67,06% de ese mercado en 2024. Este escenario de expansión ha impulsado fusiones y adquisiciones en el sector, además de atraer inversiones significativas al mercado brasileño.
Brasil se está posicionando como un actor global en el comercio electrónico al implementar un programa de cumplimiento que promete simplificar el manejo de tasas e impuestos. Esta iniciativa no solo beneficiará a las empresas, sino también a los consumidores, mediante la reducción de tarifas de importación y una postura más transparente para las transacciones internacionales.
La reforma tributaria y las nuevas regulaciones para el comercio digital representan un hito en la modernización económica de Brasil. Las empresas nacionales e internacionales deben prepararse para adaptar sus operaciones a este nuevo escenario, que promete crear un entorno de negocios más equitativo y dinámico en el país.
