Vivimos en un mundo de exceso de estímulos digitales. Solo basta encender nuestras computadoras o celulares para ser bombardeados con noticias, información y actividades que están generando una enorme adicción a las pantallas. Esta gran cantidad de horas en línea, principalmente para quienes trabajan a distancia, causa muchos perjuicios en el enfoque y la salud mental de talentos brillantes, pero que terminan operando en modo automático, como si fueran profesionales zombis.
En este escenario, Recursos Humanos desempeña un papel muy importante para garantizar que la tecnología se utilice a nuestro favor, creando conexiones y manteniendo la calidad de vida de cada uno de nosotros incluso a distancia.
La cantidad de tiempo que los brasileños pasan conectados es impactante. Son más de 90 horas semanales sumergidos en el universo en línea, según datos del IBGE, muy relacionado con el crecimiento del trabajo remoto que hizo que pasáramos mucho más tiempo frente a las computadoras realizando nuestras tareas. El resultado de esto, por otro lado, es bastante negativo para nuestra salud, aumentando los casos de ansiedad, sobrecarga y, para empeorar, disminuyendo las conexiones reales en el día a día entre los equipos.
Cada vez es más difícil captar la atención de las personas, lo que convierte esta economía de la atención en algo altamente escaso y valioso en nuestra sociedad. Es precisamente aquí donde Recursos Humanos entra como un guardián del equilibrio entre lo personal y lo profesional, en entornos naturalmente agitados afectados por los avances tecnológicos, promoviendo prácticas de desconexión saludables que fomenten temas sobre los límites que deben seguirse en este entorno digital.
Ya sea a través de talleres, charlas, mentorías u otras actividades, Recursos Humanos debe educar a los líderes sobre estos límites en línea, organizando conversaciones constantes sobre temas como la importancia de no enviar mensajes relacionados con el trabajo fuera del horario laboral, programar reuniones con anticipación para que todos puedan prepararse, fomentar pausas durante las jornadas y promover momentos de endomarketing que creen acciones para hablar de otros temas que no sean sobre el trabajo.
Estos temas deben integrar las políticas de las empresas, y no solo quedar como un "discurso bonito". Al final, las plataformas digitales están diseñadas para captar nuestros ojos y mente y, cuando esto sucede en el trabajo, perdemos lo que más necesitamos para generar valor para las empresas: el enfoque.
No podemos crear profesionales zombis, agotados en sus rutinas ante este exceso de información que reciben diariamente y que, en consecuencia, no logran producir tantos resultados cualitativos. Ellos estarán siempre en línea, pero nunca presentes de verdad, lo que convierte la atención en la moneda más valiosa que el mercado puede tener actualmente, incluso una ventaja competitiva frente a un activo tan raro de encontrar hoy en día.
El departamento de recursos humanos tiene un papel esencial en la promoción de una gestión de personas mucho más humanizada y cercana. É preciso ser um curador da atenção, criando ações que promovam e melhorem as relações entre os equipos e filtrando ruídos que prejudiquem esse objetivo maior. Ayudar a las personas a entender dónde poner energía en sus rutinas de trabajo con más inteligencia, mejorando no solo su rendimiento, sino también su calidad de vida y equilibrio entre lo profesional y lo personal.
