Hace tiempo, un artículo de los directores de McKinsey afirmó que, ante la disrupción sin precedentes del sector, las medidas que un minorista adopte hoy pueden determinar si se mantendrá como líder o rezagado durante los próximos 20 años, en alusión directa al ecosistema empresarial. Este modelo se está familiarizando gradualmente con los minoristas brasileños a un ritmo aún lento, que a veces puede resultar alarmante dadas las constantes y rápidas transformaciones que estamos experimentando.
Una cosa es segura: los consumidores ya no investigan tanto como antes y abandonan las marcas sin pensárselo dos veces. La comodidad, la sostenibilidad y la agilidad son, sin duda, la prioridad. Un estudio de McKinsey muestra que los consumidores están dispuestos a adquirir servicios complementarios de los minoristas. Por ejemplo, Walmart ofrece servicios financieros desde hace tiempo, y Amazon ha incursionado en el sector de la salud. Grandes minoristas de mascotas, como Petco, ahora ofrecen servicios veterinarios, de alimentación y de peluquería. En Brasil, tenemos buenos ejemplos con Tramontina, Multfer y Casa Teruya, que han transformado sus operaciones a través del ecosistema empresarial.
El ecosistema empresarial desempeña un papel fundamental en la expansión de una tienda, ofreciendo apoyo, oportunidades y recursos que impulsan un crecimiento sostenible. Participar en este modelo permite a una empresa llegar a nuevos mercados y consumidores que de otro modo serían inaccesibles. Esto es especialmente relevante en plataformas y mercados en línea, donde millones de consumidores participan activamente a diario.
Muchos ecosistemas empresariales ofrecen valiosas oportunidades para establecer contactos y alianzas estratégicas. Esta conexión con otros emprendedores, proveedores, inversores y expertos del sector puede abrir puertas a colaboraciones que impulsen el crecimiento de la empresa, ya sea mediante nuevos productos, servicios complementarios o expansión geográfica.
En un mercado competitivo y dinámico, formar parte de un ecosistema empresarial permite a los minoristas mantenerse al día con las tendencias y adaptarse rápidamente a los cambios del mercado. Esto incluye la adopción de nuevas tecnologías, la implementación de estrategias de marketing innovadoras y la adaptación de la oferta de productos para satisfacer las demandas de los consumidores.
Como se puede observar, esta expansión del ecosistema minorista brasileño no solo ofrece a los consumidores más opciones, sino que también crea un entorno competitivo que fomenta la innovación y la mejora continua de los servicios y productos ofrecidos. A medida que el mercado continúa evolucionando, se prevé que surjan nuevas oportunidades y desafíos que definirán aún más el futuro del comercio minorista en Brasil.